MAR DEL PLATA.- Javier Milei subió a la caja de una camioneta y empuñó un megáfono con el que improvisó un breve discurso electoral. “Estamos en un momento bisagra de la historia argentina”, sostuvo. Fue en el final de una visita de casi toda la jornada a Mar del Plata, en tren de campaña, cuando faltan menos de veinte días para las elecciones legislativas nacionales.
El Presidente habló unos pocos minutos, acompañado por su hermana Karina Milei y por los candidatos que tomaron relevancia tras la forzada renuncia de José Luis Espert, la modelo Karen Reichardt, el diputado de Pro Diego Santilli, el intendente Guillermo Montenegro y Sebastián Pareja, armador de LLA en la provincia. Pudo caminar apenas 50 metros. Luego usó la caja de una camioneta oficial como escenario en altura y megáfono en mano lanzó su breve pero encendido discurso.
“Tenemos que terminar de cruzar el río por eso es determinante lo que ocurra el 26 de octubre. Les pido que nos acompañen”, afirmó rodeado por cientos de personas, ya de noche, que lo esperaron casi una hora y media. “Vengo a pedirle el apoyo a mis candidatos”, es insistió. Gran parte de esa vigilia fue en cruces a cánticos con opositores que se instalaron en cercanías.
“A vos te queda poco, Peluca botón”, sonó de un lado del cordón de Gendarmería. “Fuera, Kuka, fuera”, respondieron del otro. “Son todos narcos”, replicaron a ritmo de hit, entre banderas partidarias de fuerzas de izquierda y Palestina. “A laburar, no vuelven más”, gritaron entre carteles que dicen “Fuerza Presidente” y “Cristina, tobillera”.
Así de tensa y de intensa fue la previa que acompañó la llegada de Javier Milei y su comitiva a la esquina de Güemes y Avellaneda, corazón del paseo comercial próximo al barrio Los Troncos de Mar del Plata que eligió para irrumpir con su nuevo formato de acto express de estos tiempos de campaña, con opositores que lo esperan y le salen al cruce allí donde se presente. Llega, habla poco y pronto y parte. Aquí, bastante más cómodo que en escalas anteriores.
Movimiento de pinzas
Con un dispositivo amplio que contempló decenas de agentes de Casa Militar y más de 300 efectivos de fuerzas federales, incluidas Prefectura Naval Argentina y Policía Federal, las expresiones opositoras intentaron un movimiento de pinzas para cerrarle el paso y limitarle despliegue.
Un grupo de fuerzas de izquierda y algunas representaciones de otros partidos políticos llegaron por la calle Güemes hasta mitad de cuadra del punto previsto para el acto. Allí quemaron algunos cartones y afiches, sin mayores consecuencias. Otro, sobre la misma arteria y a una cuadra de distancia, compuesto por quienes habitualmente participan los miércoles de la protesta en favor de los jubilados. Allí estuvieron contenidos por efectivos de Prefectura Naval Argentina.
Milei y sus acompañantes, instalados ya en la camioneta, se movieron con cierto aire de localía. Mar del Plata es uno de los lugares donde La Libertad AVanza obtuvo victoria amplia en la última elección presidencial. Por eso se movieron algo más cómodos de lo que habían sido los actos con sobresaltos y agresiones que en las últimas semanas vivieron en La Matanza, Ushuaia o Santa Fe.
Un susto se vivió cuando el Presidente y sus acompañantes, entre ellos algunos miembros de su seguridad, casi trastabillan cuando la camioneta en la que estaban instalados arrancó repentinamente por una escaramuza cercana. Se temió por un intento de agresión. La cara de susto de Raichardt impactaba en medio de esos segundos de incertidumbre. Luego todo pudo continuar, en armonía y con siempre con gritos de apoyo.
Esas expresiones de afecto también las había recibido en la puerta del Hotel Hermitage, donde se dispuso un vallado de seguridad durante las horas de la tarde que permaneció allí alojado. Al salir para el acto fue aplaudido, se sacó fotos con la gente y firmó algunas camisetas de fútbol y libros.
Milei tuvo una presencia de casi siete horas en Mar del Plata. Antes, poco después de mediodía, encabezó la inauguración de una planta industrial de la firma Lamb Weston, productora de papas procesadas congeladas, con instalaciones en el Parque Industrial General Savio.
Allí había lanzado al aire las primeras loas a Santilli, por entonces considerado quien quedaría al tope de la lista de candidatos tras la salida de Espert. Pero una fiscal anticipó que ese lugar debe ser para Reichardt y la discusión sigue abierta.
El despliegue de seguridad, que también contempló efectivos apostados en altura, atiende las advertencias que generaron experiencias recientes que se dieron en otros puntos del Gran Buenos Aires y el interior, donde sectores de la oposición generaron incidentes frente a la presencia del jefe de Estado y su comitiva de turno.