Girona, 28 may (EFE).- El entrenador del Bàsquet Girona, Moncho Fernández, ha reivindicado en la previa del último partido de la temporada ante el Hiopos Lleida, que su equipo, ya salvado en la Liga Endesa, «no se rindió a pesar de los problemas y la clasificación».
El Girona era colista con solo dos victorias en once jornadas cuando llegó el técnico gallego, a mediados de diciembre, pero los jugadores «han sido capaces de seguir trabajando, luchando y creyendo en los momentos difíciles», ha destacado Fernández.
En su penúltima rueda de prensa del curso, el técnico del conjunto catalán ha pedido «un aplauso cerrado» para la plantilla por su compromiso y por haber alcanzado «un objetivo que era muy complicado».
También ha confirmado que será el entrenador del Girona la próxima temporada y ha celebrado la renovación del escolta Pep Busquets, anunciada este martes, y la más que probable continuidad del también escolta Maxi Fjellerup.
«La continuidad siempre es una buena noticia porque te da base, cultura e identidad. Sin duda, tener que empezar y construir proyectos desde el principio cada día es duro y complicado», ha reconocido.
Moncho Fernández ha añadido que el partido de este jueves contra el Hiopos Lleida debe ser «una fiesta» y que el equipo intentará despedir la temporada con una victoria.
«Hay mucho en juego. Es una victoria en la Liga Endesa y nuestra obligación como deportistas es competir al máximo nivel, dar lo mejor y afrontarlo con el mismo espíritu que si nos fuera la vida en ello», ha sentenciado. EFE
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