Tras su vuelta a la escena pública, Montoya se está enfrentando a las declaraciones de su ex, Anita, especialmente tras sus entrevistas respondiendo tanto a él como a su familia. La joven catalana compartió recientemente que ya no siente nada por su expareja al verlo, lo que reavivó el interés mediático sobre la relación y sus motivos.
En respuesta a estas afirmaciones, Montoya no ha tardado en mostrar una actitud serena y alejada de la controversia. «No hay culpables, solo la felicidad es lo que prioriza y ya está. De verdad», ha declarado, subrayando que prefiere pasar página y enfocarse en su bienestar personal. Cuando le han preguntado por las palabras de su expareja, ha respondido con simpleza: «Vale, perfecto», eludiendo cualquier confrontación.
Además, el joven insiste en que no desea seguir alimentando las habladurías ni entrar a valorar la opinión de la influencer sobre la reciente entrevista realizada a sus padres. «Quiero ser feliz, de verdad», ha afirmado con contundencia, dejando claro que su intención es dejar atrás el pasado y centrarse en su propia tranquilidad.
Esta postura ha sido interpretada por muchos como una muestra de madurez, cerrando la puerta a nuevas polémicas y priorizando su paz emocional.