La violencia de los robos en el conurbano quedó expuesta una vez más por los disparos que volvieron a regar de sangre la zona oeste. Dos motochorros balearon a una repartidora de 37 años durante un intento de robo en Morón, dispararon luego contra los vecinos que intentaron defender a la mujer y en esa balacera hirieron a un joven.
El hecho ocurrió en la intersección de San Francisco y Ozanam, cuando la víctima se dirigía a realizar una entrega y fue interceptada por los ladrones. Según consignó la agencia Noticias Argentina, la víctima fue identificada por fuentes policiales como Yanina Noemí P.
Esa mujer circulaba en su moto cuando fue abordada por los ladrones, que intentaron robarle el rodado. Al escuchar sus gritos, Jeremías Iván F., de 21 años, salió de su casa para ayudarla, pero los agresores comenzaron a disparar.
La mujer recibió un balazo en el abdomen, aunque sin provocar heridas en órganos vitales, mientras que el joven fue lesionado por el roce de un proyectil en la tetilla izquierda.
Ambos llegaron por sus propios medios al Hospital de Morón, donde fueron atendidos y se encuentran fuera de peligro.
La policía trabajó en el lugar del hecho en busca de pistas para identificar a los agresores, que escaparon sin concretar el robo; los detectives analizan las imágenes de cámaras de seguridad instaladas en la zona del sangriento intento de robo.
El caso es investigado por el fiscal Fernando Siquier Rodríguez, de la UFI Nº 6 de Morón.
Poco antes de había conocido otro episodio de violencia en el conurbano. También en la zona oeste, aunque en ese caso el intento de robo derivó en el asesinato de la víctima y la muerte de uno de los delincuentes, en un tiroteo en Ituzaingó.
El hecho ocurrió en la colectora de la autopista del oeste, más precisamente en Avenida Perón al 7800, cuando una banda interceptó y mató al policía federal retirado Juan José Nardelli, de 55 años, que esperaba la salida de su esposa de un spa.
Al ser amenazado por los delincuentes, la víctima a bordo de una camioneta Volkswagen Amarok, sacó su arma, una pistola Glock 9 milímetros. En ese momento se produjo un intercambio de disparos durante el cual el policía retirado recibió un balazo en el pecho.
Desde el interior del spa, su esposa escuchó los ruidos y salió a la calle para ver que sucedía, fue en ese momento que encontró a su marido herido de gravedad. Nardelli fue trasladado de urgencia al hospital Güemes de Haedo, donde llegó sin vida.
En el tiroteo también resultó herido uno de los delincuentes, quien murió en un hospital de la zona. Se trata de Marcos Uriel Catalán, de 18 años, quien fue dejado horas más tarde en el hospital Ramón Carrillo con un disparo en su rostro y falleció pocos minutos después.
Por otro lado, la persona que lo trasladó al nosocomio es un adolescente de 14 años, que manejaba un Peugeot 308 blanco. Fue detenido y se investiga su presunta vinculación con el crimen.
En el momento de interceptar a Nardelli, los asaltantes se desplazaban en un Citroën Cactus que había sido robado en Ciudadela, luego del hecho, el vehículo fue encontrado a pocos metros del lugar donde ocurrió el tiroteo, con manchas de sangre.
Después de abandonar el Citroën, la banda robó otro vehículo, una camioneta Ford Ranger, que posteriormente también fue abandonada e incendiada en el barrio de Fuerte Apache, donde se concentra la búsqueda de los responsables.
La investigación de la caso quedó a cargo de la fiscal María Alejandra Bonini. que ordenó el análisis de imágenes de cámaras de seguridad instaladas en la zona del hecho con el objetivo de buscar pistas sobre los delincuentes.