En Miami se vivió una noche de lujo y glamour por el estreno oficial del MSC World America, el impactante nuevo crucero de la compañía italiana que tiene 22 pisos y capacidad para 6.762 pasajeros y 2.138 tripulantes.
La ceremonia de bautismo -a la que asistió Infobae– se celebró a bordo del barco en la flamante terminal de PortMiami, con un mix de show y elegancia que contó con la participación estelar de Orlando Bloom y Drew Barrymore. El actor, que participó en éxitos como “Piratas del Caribe” y “El señor de los anillos”, y la actriz que saltó a la fama por su rol en ET (y otras tantas películas) fueron las dos celebridades elegidas para realizar ceremonia en la que se estrella una botella de champán contra el casco del buque, una tradición naval que da inicio oficial a la vida operativa del barco.
Ese acto fue el remate de una larga e impactante campaña de promoción que comenzó en febrero en el Super Bowl 2025, el evento deportivo que paraliza a los Estados Unidos, en el que colocar una publicidad cuesta millones de dólares. En el entretiempo de ese partido de fútbol americano se emitió un comercial de 60 segundos que mostró a Bloom y Barrymore disfrutando de las lujosas instalaciones del MSC World America mientras cantaban “Holiday”, la icónica canción de Madonna.
Finalmente llegó el momento de salir al mar, pero antes de zarpar hubo espacio para la celebración: la cantante cubana Gloria Estefan, ícono de la música latina y referente cultural en La Florida, ofreció un concierto repleto de hits que cerró una velada de lujo y festejo en la que también participaron el primer ministro de Bahamas, Philip Davis, la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, y ejecutivos de la naviera como Pierfrancesco Vago y Gianni Onorato, presidente y CEO de MSC Cruceros.
Alrededor de las 3 de la mañana el buque comenzó a navegar hacia la exclusiva Ocean Cay MSC Marine Reserve, una isla privada en las Bahamas, donde miles de pasajeros pudieron descansar en playas paradisíacas y disfrutaron espectáculos nocturnos.
Una ciudad flotante: entretenimiento inmersivo, gastronomía global y zonas temáticas
El buque asombra por fuera y deslumbra por dentro porque es una especie de ciudad flotante de alta gama, que cuenta con opciones de entretenimiento, gastronomía y servicios que compite sin problemas con lo que ofrece cualquier resort de lujo urbano. “Combina el estilo europeo con el confort que busca el público norteamericano”, aseguran desde la compañía italiana que tiene su sede central en Suiza.
Los pasajeros pueden elegir entre siete distritos temáticos, cada uno con su propia estética y ritmo, que apuntan a satisfacer perfiles diversos de viajeros; desde familias multigeneracionales hasta adultos que buscan descanso o lujo exclusivo. Las áreas son las siguientes:
- MSC Yacht Club: zona exclusiva con acceso restringido, suites de lujo, restaurante gourmet, piscina privada, salón panorámico y servicio de mayordomo 24/7.
- Family Aventura: pensado para familias con niños, incluye el parque al aire libre The Harbour, la atracción Cliffhanger, Doremiland y una amplia oferta de juegos y actividades LEGO®.
- Aqua Deck: punto de encuentro junto a las piscinas principales, donde la programación diaria va desde relax hasta fiestas nocturnas.
- Zen Area: espacio reservado para adultos con piscinas de uso exclusivo, música suave y vistas al mar en un entorno de calma. Incluso tiene una zona con nieve.
- Galleria: corazón comercial y social del barco, repleto de bares, tiendas, cafés y el Luna Park Arena. El área comercial abarca más de 1.000 m² con nueve tiendas y boutiques de distintos segmentos.
- The Terraces: zona mixta de restaurantes temáticos, bares, locales de retail y el Comedy Club con duelos de piano y karaoke.
- Promenade: un corredor al aire libre en la cubierta 8 con vistas oceánicas, espectáculos, gastronomía rápida y el tobogán seco llamado Jaw Drop de 11 pisos.
El mayor atractivo para quienes buscan adrenalina se encuentra en The Harbour, un parque al aire libre con toboganes acuáticos, circuito de cuerdas y un faro temático que sirve como punto de observación. Allí también está el intimidante Cliffhanger, el primer columpio sobre el océano, que eleva a los pasajeros 50 metros por encima del mar y pone a prueba la resistencia a las emociones fuertes.
En materia gastronómica, el buque cuenta con 19 restaurantes. El mas destacado es Eataly at Sea, el primero de la marca italiana en alta mar, con cocina abierta, ingredientes importados directamente desde Italia y una carta centrada en la autenticidad culinaria. También debutan conceptos como Paxos, restaurante griego con terraza y salón lounge, y una amplia gama de locales informales como La Boca Grill (hamburguesas y parrilla), Hola! Tacos & Cantina (comida mexicana) o Promenade Bites (snacks internacionales).
La oferta de bebidas incluye 18 bares y lounges, con espacios temáticos como The Gin Project, que ofrece 20 tipos de gin artesanales; Elixir – Mixology Bar, centrado en cócteles con bourbon; y el All-Stars Sports Bar, decorado con memorabilia deportiva y equipado con pantallas HD y juegos interactivos.
Alojamiento: 19 tipos de cabinas
La oferta de hospedaje refleja la diversidad de públicos a los que apunta MSC World America. En total hay 2.614 camarotes de diferentes niveles y características:
- Suites MSC Yacht Club: incluyen las Owner’s Suites de más de 150 m² con hidromasaje y terraza privada, y las Duplex Suites con dos niveles, baño completo, living y solárium exclusivo. Es el sector más VIP del crucero, tiene accesos restringidos y mayordomo las 24 horas
- Cabinas familiares conectadas: múltiples opciones para grupos numerosos que se intercomunican internamente, pensadas para vacaciones multigeneracionales.
- Infinite Ocean View: cabinas con ventana panorámica deslizante que se transforma en baranda de vidrio, exclusiva de los barcos de clase World.
- Balcones sobre la Promenade: habitaciones con vistas directas al paseo marítimo exterior, insertas en el corazón de la vida social del barco.
- Interiores y cabinas estándar: opciones económicas, diseñadas con estilo europeo, confort funcional y detalles personalizados.
Miami como epicentro y el Caribe como destino
La elección de Miami como puerto base para el MSC World America no es casual: es la capital mundial de los cruceros y el punto estratégico ideal para consolidar la expansión de MSC Cruises en América del Norte. Desde su nueva terminal exclusiva en PortMiami, la más grande del mundo con capacidad para 36.000 pasajeros diarios, la naviera proyecta itinerarios semanales que conectan el sur de Florida con los destinos más emblemáticos del Caribe.
Este imponente crucero ya ofrece salidas de 7 noches por el Caribe oriental y occidental, con escalas en Puerto Plata (República Dominicana), San Juan (Puerto Rico), Costa Maya y Cozumel (México), Roatán (Honduras), y una parada extendida en la Ocean Cay MSC Marine Reserve, la isla privada de la naviera en Bahamas. Este último destino, anteriormente un sitio industrial, fue transformado por MSC en un santuario ecológico con playas vírgenes, arrecifes restaurados y una propuesta de entretenimiento nocturno que incluye fiestas en la playa y espectáculos de luces en su emblemático faro.
Un coloso del mar: diseño, sostenibilidad y visión global
Construido en los astilleros de Chantiers de l’Atlantique, en Saint-Nazaire, Francia, el MSC World America es el 23º buque de la empresa y una de las embarcaciones más imponentes del mundo. Con una eslora de 333 metros y 2614 camarotes, su diseño combina innovación tecnológica, eficiencia energética y una múltiple propuesta de ocio con gimnasio, casino, teatro y bares temáticos.
Uno de sus elementos más destacados es el enfoque medioambiental: este crucero está propulsado por gas natural licuado (GNL), una de las fuentes más limpias disponibles en la industria marítima. Cuenta con sistemas avanzados de tratamiento de aguas residuales, planta de reciclaje integrada y conectividad eléctrica en puerto, que le permite apagar motores durante las escalas para reducir emisiones. Por estas características recibió el Platinum Pearl Award de Bureau Veritas, uno de los máximos reconocimientos en desempeño ambiental del sector.