Miles de familias en la Franja de Gaza han visto cómo sus tiendas de campaña fueron desalojadas por las inundaciones que provocaron las lluvias recientes, lo que ha dejado a más de 27.000 hogares sin ningún tipo de resguardo bajo temperaturas extremadamente bajas. En este contexto, el Ministerio de Sanidad gazatí reportó la muerte de Mohamed Jalil abú al Jair, un bebé palestino de apenas catorce días, quien perdió la vida este martes tras permanecer dos días en la unidad de cuidados intensivos de un hospital local, debido a complicaciones derivadas del frío. Tal como publicó el diario palestino Filastin, la situación se presenta especialmente adversa para los cientos de miles de desplazados que residen en condiciones precarias como resultado de la ofensiva israelí iniciada tras los ataques del 7 de octubre de 2023.
Según consignó el diario Filastin, la tormenta polar ‘Byron’ ha intensificado la crisis humanitaria en Gaza, al provocar un descenso brusco de temperaturas y fuertes precipitaciones que han ocasionado inundaciones severas en áreas donde conviven multitud de familias desplazadas. El paso de esta tormenta ha resultado en más de una decena de fallecimientos en el enclave, además de sumarse a la devastación ya existente producto de la confrontación armada entre fuerzas israelíes y grupos palestinos.
Desde que comenzó la última ofensiva militar israelí, cientos de miles de residentes de Gaza se han visto forzados a abandonar sus hogares, estableciendo refugios temporales en carpas proporcionadas por organizaciones humanitarias o improvisadas con materiales disponibles. El medio Filastin indicó que la llegada de ‘Byron’ ha devastado estos asentamientos provisorios; las ráfagas de viento y la acumulación de agua arrasaron numerosas tiendas, dejando a decenas de miles de personas a la intemperie. Las condiciones insalubres han empeorado ante la dificultad de acceder a atención médica, alimentos y agua potable suficiente.
El Ministerio de Sanidad local, citado por el diario Filastin, comunicó que Mohamed Jalil abú al Jair había sido ingresado en cuidados intensivos hace dos días, cuando las temperaturas descendieron de forma abrupta y el menor presentó complicaciones graves de salud, producto de la exposición al frío. La muerte del niño y el resto de víctimas asociadas a la tormenta se inscriben en un contexto donde los servicios básicos se encuentran severamente deteriorados a raíz de los ataques y bloqueos, que han dañado infraestructuras eléctricas y de salud, obstaculizando la capacidad de respuesta ante emergencias.
La presencia de la tormenta ‘Byron’ no solo incrementó el riesgo para la población desplazada, sino que también dificultó el trabajo de los equipos de rescate y asistencia correspondientes, según reportó Filastin. Muchas familias debieron trasladarse durante la noche, en condiciones peligrosas, tras ver sus refugios destruidos por las lluvias y el viento. A pesar de los esfuerzos de las autoridades sanitarias y las organizaciones de ayuda, la capacidad de respuesta permanece limitada por la magnitud de la destrucción y la escasez de recursos.
Desde el inicio de la ofensiva israelí en Gaza, impulsada como respuesta a los ataques del 7 de octubre de 2023, la Franja enfrenta una destrucción generalizada de sus infraestructuras, con un impacto grave en la provisión de servicios médicos, el suministro de energía y el acceso a tratamiento para enfermedades relacionadas con el clima. Filastin detalló que el frío extremo y las malas condiciones de los refugios temporales están favoreciendo la proliferación de enfermedades respiratorias y casos de hipotermia, afectando principalmente a menores y ancianos.
Las autoridades sanitarias locales, en declaraciones a Filastin, han solicitado asistencia internacional urgente para paliar las consecuencias de la tormenta y la crisis humanitaria resultante. Hasta la fecha, la ayuda recibida resulta insuficiente frente a la dimensión de las pérdidas materiales y el número de desplazados afectados. El deceso de Mohamed Jalil abú al Jair se suma a una lista creciente de víctimas de factores ambientales, que se agravan en un contexto de conflicto y escasez de recursos básicos, recogió el diario palestino.
