
Al menos tres policías paquistaníes han muerto a causa de un ataque perpetrado a última hora del miércoles contra un puesto de control en la provincia de Jáiber Pastunjua (norte), situada cerca de la frontera con Afganistán, sin que por ahora haya reivindicación de la autoría.
El ministro del Interior paquistaní, Mohsin Naqvi, ha condenado el ataque, ejecutado en la localidad de Hangu, y ha ensalzado la labor de los «mártires». «El sacrificio del personal que ha caído mártir no será en vano», ha afirmado a través de un mensaje en su cuenta en la red social X.
«Estos sacrificios son un testimonio del compromiso inquebrantable de Pakistán en la guerra contra el terrorismo», ha señalado, antes de subrayar que «la Policía de Jáiber Pastunjua ha hecho inmensos sacrificios en la guerra contra el terrorismo», dado que «está en primera línea» en la lucha contra estos grupos.
El Departamento Antiterrorista provincial ha denunciado un «cobarde ataque» contra los agentes, antes de asegurar que los enfrentamientos se saldaron con la muerte de un número de atacantes, sin más detalles al respecto, tal y como ha recogido el diario paquistaní ‘Dawn’.
La zona fronteriza con Afganistán ha sido desde hace años escenario de inseguridad, especialmente a causa de los ataques por parte de Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP), en medio de acusaciones de a India y los talibán afganos por su presunto apoyo a la organización, algo rechazado desde Nueva Delhi y Kabul. Islamabad ha llevado a cabo varios ataques aéreos contra territorio afgano en los últimos meses alegando que actúa contra el citado grupo.