El nacimiento de una cría de elefante marino en la Escollera Sur de Puerto Quequén moviliza acciones de protección y concientización sobre la fauna costera.
Nace un elefante marino en Puerto Quequén: llamado al respeto y la protección de la fauna silvestre
En un hecho poco frecuente para la región, una elefante marino dio a luz en la playa de los lobos marinos, ubicada sobre el acceso a la Escollera Sur de Puerto Quequén.
El nacimiento fue confirmado por Yael Matar, vecina de la Ciudad , el Consorcio de Gestión, emitió un comunicado solicitando respeto y cuidado hacia la madre y su cría durante esta etapa crítica.
Durante el período de lactancia exclusiva, que se extiende por aproximadamente 25 días, es fundamental no interferir en el vínculo madre-cría. Por ello, el ente portuario recomienda:
- No molestarlos ni intentar acercarse
- No alimentarlos
- Evitar el acercamiento de mascotas
La madre realiza breves incursiones al río y al mar, vigilando a su cría desde la orilla. Se advierte que, aunque el cachorro pueda parecer solo, la madre está cerca y puede reaccionar ante cualquier amenaza. Estos animales, de gran tamaño y comportamiento salvaje, pueden responder con agresividad si se sienten estresados o si perciben peligro para su cría.
El destete ocurre de forma abrupta, tras lo cual la madre puede permanecer algunos días más en la playa antes de iniciar sus viajes de alimentación a mar abierto, que pueden durar hasta dos meses. En ese lapso, los cachorros permanecen en la costa, realizando incursiones cada vez más frecuentes para aprender a alimentarse por sus propios medios.
Desde el Consorcio se remarca que esta etapa es crítica para la supervivencia de ambos: el cachorro, por su fragilidad e incapacidad de nadar, y la madre, por el ayuno prolongado que implica una considerable pérdida de peso.
Este acontecimiento refuerza la importancia de preservar los espacios naturales costeros y de fomentar una convivencia respetuosa con la fauna marina que habita o transita por nuestras costas.