El empresario y filántropo alemán Bernd Kebbel (59) murió el pasado viernes tras ser atacado por una leona mientras acampaba en el Hoanib Skeleton Coast Camp, una exclusiva reserva ubicada en la remota región de Kunene, al noroeste de Namibia, según informaron autoridades locales en las últimas horas.
El incidente ocurrió cuando Kebbel salió de su carpa para ir al baño durante la madrugada. En ese momento fue sorprendido por una leona, identificada localmente como “Charlie”, que lo atacó y le provocó heridas fatales en el cuello. A pesar de los esfuerzos de su esposa, Conny, y otros campistas, el empresario murió en el lugar.
“Podemos confirmar que lamentablemente el Sr. Kebbel falleció durante el incidente”, declaró a los medios locales el portavoz del Ministerio de Medio Ambiente, Silvicultura y Turismo, Ndeshipanda Hamunyela. En simultáneo, el jefe de la policía de Namibia, Immanuel Iiduwa, anunció la apertura de una investigación en relación
Kebbel era una figura destacada en Namibia, conocido por su compromiso con la conservación de la fauna silvestre y su pasión por las actividades al aire libre. Fue propietario de Off-Road Centre, una empresa con sede en Windhoek especializada en la venta de vehículos todoterreno y accesorios para safaris.
Su dedicación a la protección de los leones lo llevó a realizar importantes contribuciones financieras a programas de conservación. En reconocimiento a su apoyo, se nombró a un león en su honor. Sin embargo, ese ejemplar fue posteriormente sacrificado debido a comportamientos peligrosos con humanos.
Con respecto a la leona responsable del ataque, era conocida por los conservacionistas locales y se encontraba en la zona con sus cachorros. Tras el incidente, la cartera de Medio Ambiente, Silvicultura y Turismo de Namibia tomó la determinación de sacrificar al animal el domingo, bajo el argumento de “representar una amenaza”.
Este trágico suceso ha reavivado el debate sobre la seguridad en los safaris de lujo en Namibia, especialmente en áreas donde los campamentos no cuentan con baños dentro de las tiendas, lo que obliga a los huéspedes a salir al exterior durante la noche. Aunque los ataques de leones a humanos son raros, la creciente interacción entre humanos y fauna salvaje, exacerbada por factores como la sequía, incrementó el riesgo de estos encuentros.
Bernd Kebbel deja atrás a su esposa, Conny, y a sus dos hijos adultos, Dieter y Heidi, quienes residen en Sudáfrica y regresaron a Windhoek para apoyar a su madre tras la tragedia.
Con información de AFP