Viajar en avión puede ser toda una odisea cuando el asiento es tan pequeño que apenas cabes. Aunque todas las aerolíneas intentan maximizar espacio y beneficios, algunas ofrecen asientos ligeramente más amplios que otros. Y sí, aunque hablemos de centímetros, la diferencia se nota.
El medio especializado Which? ha analizado las dimensiones de los asientos en vuelos de corta distancia y ha llegado a una conclusión clara: aunque el rango de anchura no es muy amplio entre 17 y 18 pulgadas, ese centímetro de diferencia puede cambiar radicalmente la experiencia del pasajero.
En trayectos donde cada minuto de incomodidad parece eterno, una pulgada extra puede marcar la diferencia entre viajar apretado o con cierta holgura.
Las aerolíneas más cómodas
Según el informe, las aerolíneas de bajo coste con los asientos más anchos son Wizz Air, TAP Portugal, EasyJet y Lufthansa, todas con butacas que alcanzan las 18 pulgadas. Esto las coloca en el lado “amable” del ranking, ofreciendo un poco más de comodidad sin necesidad de pagar un billete de clase business.
Para muchos viajeros frecuentes, esta diferencia puede suponer no solo comodidad, sino también menos dolores de espalda o piernas entumecidas al llegar a destino.
Las más apretadas
En el otro extremo están British Airways, Jet2, KLM, Norwegian, Ryanair, TUI y Aer Lingus, que cuentan con asientos de apenas 17 pulgadas de ancho. En vuelos cortos, puede ser tolerable, pero en rutas de dos o tres horas, la experiencia resulta bastante más incómoda.
La española Vueling se queda en un punto intermedio, con butacas de 17,5 pulgadas, que no destacan por amplitud, pero tampoco son las más reducidas del mercado.
Trucos para conseguir más espacio
La buena noticia es que existen pequeños trucos para ganar algo de comodidad, incluso si viajas con una aerolínea de las más ajustadas.
El primer truco es reservar un asiento en el mamparo. Son los que se encuentran justo detrás de las paredes, cortinas o biombos que separan diferentes secciones del avión. Al no tener butacas delante, permiten estirar las piernas al máximo.
Por otra parte puedes elegir la parte trasera del avión. En algunos modelos de aeronaves, las filas traseras tienen menos asientos y, por lo tanto, algo más de espacio. Eso sí, corres el riesgo de estar demasiado cerca de los baños, lo cual puede resultar bastante incómodo.
Cambiarse durante el vuelo. Si el avión no va lleno, siempre puedes preguntar al asistente de vuelo si te permite moverte a un asiento vacío. Con un poco de suerte, podrías terminar con una fila completa solo para ti.
Finalmente puedes solicitar un traslado especial. Si viajas embarazada, eres muy alto o tienes necesidades médicas, la tripulación puede ofrecerte un asiento más espacioso para que el trayecto sea más llevadero.
En un contexto en el que las aerolíneas low cost ajustan al máximo cada detalle para abaratar costes, los centímetros importan. Un simple asiento de 18 pulgadas frente a uno de 17 puede marcar la diferencia entre un vuelo incómodo y otro más llevadero.
Por eso, antes de reservar tu próximo billete, quizá convenga fijarse en algo más que el precio: el espacio disponible puede valer ese pequeño extra de inversión.