Nito Artaza tiene una vida amorosa intensa. Aunque evita referirse a su intimidad, se ha hablado mucho de sus historias de amor: por las rupturas escandalosas que protagonizó, por las sospechas de infidelidad y algunos secretos a voces.
Su primer gran amor fue la bailarina francesa Françoise Dugas, con quien tuvo dos hijos, Sabrina y Juan Manuel. Luego se enamoró de la vedette Cecilia Oviedo y fueron padres de Leandro. Pero la relación que más dio que hablar fue con la actriz Cecilia Milone, con quien, entre idas y vueltas, estuvo casi 25 años y se separó luego de rumores de infidelidad con una compañera de elenco, Belén Di Giorgio. También fue pareja de la ex Gran hermano Silvina Scheffler.
La celestina de Artaza y Dugas fue Moria Casán. A principios de los 80, hacía rato que Moria era cabeza de compañía y Nito recién debutaba con el nombre de Sapucay. Ambos subían al escenario del Teatro Tabaris para hacer Los años locos. Françoise había llegado especialmente de París para participar en la revista como parte del grupo Bluebell Girls. Fue un flechazo. El noviazgo fue corto porque enseguida se fueron a vivir juntos y nacieron Sabrina y Juan Manuel, ambos actores también.
La relación con Dugas duró una década hasta que Artaza conoció a Oviedo, una bailarina con quien compartía elenco. El romance nació una noche de verano de principios de los 90 y estuvieron juntos casi 15 años hasta que la relación clandestina de Nito y Cecilia Milone se hizo pública y estalló el escándalo.
Leandro, hijo de Nito y Oviedo, era chico todavía cuando empezaron los problemas en la pareja. Los programas de chismes de todos los canales hablaban de ese triángulo amoroso y sobraron gritos y acusaciones. Oviedo salió a despotricar contra Milone, que al principio callaba. Y Artaza tampoco hablaba. Siguieron unos años más juntos hasta que se separaron.
Una historia que parecía para siempre, pero…
Artaza y Cecilia Milone se conocieron en 1999 cuando protagonizaban Boeing Boeing, en la temporada marplatense. Él estaba casado todavía, por lo que mantuvieron el romance en secreto hasta 2006. Durante siete años tuvieron encuentros a escondidas y la separación de Nito era un tema recurrente en la pareja, pero nunca se concretaba.
La historia parecía funcionar de esa manera hasta que alguien habló de la relación públicamente y estalló el escándalo. Milone empezó a recibir amenazas anónimas que aseguraban “nunca vas a ser feliz”.
En los programas de chimentos de la época, la actriz decía: “No puedo decir que Cecilia Oviedo sea quien me manda los mensajes porque son anónimos. Lo que puedo decir es que los mensajes la involucran y están redactados de tal manera que parecen escritos por ella”.
Desencantada, Milone se fue a vivir un tiempo a España y a su regreso, para sorpresa de todos, gritó a los cuatro vientos el romance clandestino que había vivido con Artaza durante siete años, lo que provocó que Nito y Oviedo le iniciaran un juicio que Milone perdió. Así, la relación pareció romperse definitivamente. Fue en ese momento que Oviedo dijo la famosa frase “I’m sorry for you, querida”. “Yo lo lamento. Si estás resentida andá a un psiquiatra”, remarcó en el programa que entonces tenía Marcelo Polino, Ponele la firma.
Y sumó: “Yo no tengo la culpa si el tipo te colgó la galleta y nunca te blanqueó porque no fuiste importante. ¿Qué culpa tengo si no se jugó por vos y lo único que hacía era pasar un rato con vos porque estaba solo o aburrido?“ Con el tema en los medios, Artaza contó entonces que con Milone había tenido “encuentros esporádicos”, pero hizo una aclaración: ocurrieron durante sus “tiempos de soltero”.
¿Chau Milone?
Al poco tiempo, Artaza se separó de Oviedo y empezó una relación con la ex Gran hermano Silvina Scheffler, quien luego del reality tuvo un momento de gran exposición. Estuvieron juntos durante cuatro años y participaron en el Bailando por un sueño 2015. Por ese entonces, Nito y Milone se reencontraron y las cenizas del amor se encendieron otra vez. Los rumores de la época señalaban que Scheffler le dio un ultimátum al actor y productor: “Si Cecilia Milone es el amor de tu vida, andate con ella”. Y se separaron, por supuesto.
Reconciliación y boda
La reconciliación de Artaza y Milone terminó en boda: el 25 de junio de 2017 se casaron en Bella Vista, Corrientes, ciudad natal del actor y exsenador por la Unión Cívica Radical. Los padrinos fueron Pepito Cibrián y Moria Casán y en la fiesta con 300 invitados, tiraron la casa por la ventana. A partir de entonces se mostraron felices en estrenos y eventos, y no solamente convivían, sino que trabajaban juntos también.
Todo parecía felicidad entre ellos hasta que en 2023 se empezó a hablar de crisis en la pareja y finalmente se separaron a principios de 2024, en medio de un escándalo y de rumores de infidelidad por parte de Nito con una colega de su elenco, Belén Di Giorgio.
El humorista primero negó la separación: “Se hizo una sobredimensión de una discusión. Las discusiones con Cecilia son fuertes. Fue un error mío porque ella es un amor, Cecilia es todo lo que está bien. Por ejemplo, yo puedo mirar una chica, y decir, ‘mirá, qué linda chica’ y Cecilia no dice nada, pero yo me olvido un aniversario, y duermo afuera”.
Pero antes de que todo terminara, se había hablado en los medios de algunas tensiones en la pareja, sobre todo cuando trabajaban juntos. A estos rumores ellos respondían diciendo que se trataba de idas y vueltas normales en un matrimonio. Por ejemplo, en una entrevista que realizaron con LA NACION cuando los dos estaban haciendo teatro en Mar del Plata, Artaza expresó: “Generalmente, las discusiones con Cecilia son por el espectáculo porque a veces tenemos criterios diferentes. Estoy acostumbrado a dirigir, tengo mi estilo, pero en este caso la directora es ella y yo tengo que agachar la cabeza. Y a veces me cuesta (risas). Nos pasó en La jaula de las locas, pero nos ponemos siempre de acuerdo porque hay mucho amor. No suelo aconsejar trabajar con la pareja, aunque ayuda porque somos la unión de dos individualidades que nos amamos, y cada uno tiene sus proyectos personales, sus actividades”.
En tanto, Milone agregó: “Compartir el trabajo siendo pareja es algo positivo, creo yo. Tenemos las mismas discusiones que podemos tener como pareja, y que a veces son fuertes, pero también sabemos convivir con eso una vez que pasa. En general, es cierto, discutimos más que nada por trabajo. Gustavo Monje, que es nuestro artista invitado en el espectáculo, dice que a veces discutimos diciendo lo mismo, pero cada uno lo explica de una manera diferente. Nos pasa eso”.
Sin embargo, los rumores con los años se confirmaron y la crisis se convirtió en separación, tras la cual Milone además terminó confesando que el gran amor de su vida no fue Artaza, con quien dijo haber atravesado un grave episodio antes del punto final de la relación, sino Chico Novarro.
Ahora, si se encuentran en el mismo lugar, Artaza y Milone se evitan.