El colesterol es una sustancia grasa esencial para el cuerpo, ya que participa en la producción de hormonas, la formación de vitamina D y el correcto funcionamiento de las células.
Sin embargo, no todo el colesterol actúa de la misma manera. Mientras que el colesterol LDL (conocido como “malo”) contribuye a la acumulación de placas en las arterias, el colesterol HDL o “bueno” ayuda a transportarlo fuera de las arterias, reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Mejorar los niveles de colesterol bueno es crucial para mantener una circulación saludable, prevenir infartos y garantizar el correcto flujo sanguíneo. Dentro de los diversos factores que influyen en sus niveles, el colágeno, conocido mayormente por sus beneficios estéticos, aparece como un aliado inesperado en la tarea de proteger el corazón.
¿Qué es el colágeno y cómo beneficia al colesterol?
El colágeno es una proteína presente de forma natural en el organismo, especialmente en la piel, los huesos, los tendones y el tejido conectivo. Aunque su función más mencionada está relacionada con la elasticidad de la piel y el fortalecimiento del cabello y las uñas, investigaciones recientes han revelado que también impacta positivamente en la salud cardiovascular, promoviendo el aumento del colesterol HDL y, por lo tanto, reduciendo los niveles de LDL en la sangre.
Uno de los aminoácidos clave que conforman el colágeno es la glicina, que desempeña un papel importante en el metabolismo y la regulación de los lípidos. La glicina puede apoyar la disminución de la inflamación y mejorar la sensibilidad a la insulina, factores que contribuyen a mantener un perfil lipídico saludable. Además, el colágeno promueve la integridad de las paredes arteriales, lo que puede evitar la formación de depósitos de grasa en las arterias (aterosclerosis).
Otros beneficios del colágeno
Más allá de su impacto en los niveles de colesterol, el colágeno tiene múltiples efectos beneficiosos para el organismo:
- Salud cardiovascular:El colágeno ayuda a fortalecer las paredes de los vasos sanguíneos, mejorando su elasticidad y evitando problemas como la hipertensión y las enfermedades arteriales. Esto, en combinación con un aumento del colesterol bueno, protege al corazón de daños a largo plazo.
- Reparación articular:Mantiene los cartílagos sanos, aliviando dolores articulares y mejorando la movilidad, especialmente en personas que practican actividades físicas intensas.
- Función digestiva:Contribuye a la salud intestinal al reparar la mucosa, crucial para evitar problemas como el intestino permeable.
- Estética y regeneración celular:Favorece la regeneración de tejidos, fortaleciendo la piel y promoviendo un aspecto joven y saludable.
El colágeno se puede incluir en la dieta mediante alimentos como el caldo de huesos, el pescado y otros productos ricos en gelatina. Los suplementos de colágeno, en forma de hidrocloruro o péptidos, son una opción cómoda y efectiva, especialmente si se combinan con vitamina C, que mejora su producción y absorción.