Aunque las imágenes más estremecedoras del clima extremo en Estados Unidos suelen estar ligadas a huracanes, tornados o inundaciones, hay un enemigo silencioso que se cobró más vidas que cualquier otro fenómeno meteorológico: el calor. Año tras año, las estadísticas demostraron que las temperaturas extremas causaron más fallecimientos que tormentas, relámpagos o corrientes de resaca. Aunque esta amenaza es menos visible, sus consecuencias han sido devastadoras.
El calor extremo, la principal causa de muerte meteorológica en EE.UU.
Según los datos recopilados por el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) en su informe “80-Year List of Severe Weather Fatalities”, el calor fue la causa más letal de fallecimientos relacionados con el clima en múltiples ocasiones a lo largo de las últimas décadas. Este fenómeno superó incluso a los huracanes y tornados.
Desde 1995 hasta 2024, las muertes por calor encabezaron el listado de fatalidades en 15 años distintos. En el primero de estos, se produjo el mayor número de decesos por este motivo, con 1021 víctimas fatales.
A lo largo de otros años también se observaron cifras significativamente altas:
- En 1995, se registraron 1021 decesos por las temperaturas elevadas.
- En 1999, el calor causó 502 muertes.
- En 2000, hubo 158 víctimas fatales por temperaturas extremas.
- En 2001, las muertes alcanzaron las 166.
- En 2002, se contabilizaron 167 fallecimientos.
- En 2006, el número ascendió a 253.
- En 2011, se registraron 206 decesos.
- En 2012, se produjeron 156 muertes.
- En 2017, el calor causó 107 víctimas.
- En 2018, hubo 108 fallecimientos.
- En 2019, se registraron 187 muertes.
- En 2020, se contabilizaron 350 decesos.
- En 2021, las muertes alcanzaron las 375.
- En 2022, se reportaron 383 víctimas.
- En 2023, el calor cobró la vida de 555 personas.
Desde el inicio del registro histórico, las muertes por calor sumaron 6221. Esta cifra es superior a la de víctimas por huracanes (3595), frío extremo (1157), fenómenos invernales (1453), corrientes de resaca (1377) y vientos fuertes (1651).
Solo los rayos (9476), tornados (8027) e inundaciones (8761) causaron más fallecimientos totales, aunque el calor supera a todos en promedio anual reciente.
Temporada 2024: cuántas muertes hubo por calor extremo
En 2024, la tendencia se repitió. Según los datos más recientes del NWS, se registraron 723 muertes relacionadas con fenómenos climáticos. De ellas, 177 fueron causadas por el calor, por lo que se posicionó una vez más como la categoría más letal.
Así quedó el ranking de fallecimientos por tipo de fenómeno en 2024:
- Inundaciones: 145 muertes.
- Huracanes: 78 víctimas.
- Corrientes de resaca: 73 decesos.
- Viento: 71 fallecimientos.
- Tornados: 52 muertes.
- Frío extremo: 46 decesos.
- Fenómenos invernales: 29 víctimas.
- Rayos: diez personas fallecidas.
Además, los daños económicos provocados por todas estas amenazas alcanzaron los 15.730 millones de dólares en 2024. La suma evidencia que, más allá del número de víctimas, el impacto de los fenómenos meteorológicos es enorme, tanto en vidas humanas como en pérdidas materiales.
Por qué el calor causa tantas muertes
Uno de los aspectos más alarmantes del calor extremo es que sus efectos muchas veces pasan desapercibidos. A diferencia de un huracán o un tornado, que tienen una presencia visual y sonora inconfundible, las olas de calor se infiltran lentamente y afectan principalmente a los sectores más vulnerables de la población.
Por ejemplo, durante la ola de calor de Chicago en 1995, la mayoría de las víctimas correspondió a personas mayores que vivían en departamentos sin aire acondicionado, según el informe oficial de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés).
Esta tragedia cambió la forma en que los municipios y agencias federales enfrentan este tipo de fenómenos. Actualmente, cuando se detecta un riesgo inminente por temperaturas extremas, las ciudades activan centros de enfriamiento para la población sin acceso a refrigeración.
También se fortalecieron los canales de comunicación entre el Servicio Meteorológico Nacional, los gobiernos locales y las fuerzas de seguridad para advertir sobre los riesgos y brindar recomendaciones a la ciudadanía.
En 2024, el NWS expandió su herramienta “HeatRisk” a todo EE.UU. Esta plataforma ayuda a visualizar la peligrosidad del calor previsto, en función de su impacto potencial sobre la salud humana.