Un derrumbe de rocas y tierra volvió a interrumpir por completo el tránsito en la Panamericana Sur, a la altura del kilómetro 732, en el tramo Ático–Ocoña, región Arequipa. El deslizamiento, registrado la tarde del martes en la zona conocida como Quebrada Onda, cubrió aproximadamente 60 metros de la vía e impidió el paso en ambos sentidos. Según reportes preliminares de Provías y de la Policía de Carreteras, el derrumbe sería de una magnitud considerablemente mayor a los anteriores ocurridos en el mismo sector.
El incidente dejó varados a buses interprovinciales, vehículos de carga y autos particulares que transitaban por la ruta que conecta Arequipa, Camaná y Lima. Testigos indicaron que varios conductores se salvaron de manera repentina, pues el cerro cedió abruptamente, desprendiendo grandes volúmenes de rocas sobre la carretera. Hasta el momento no se han reportado heridos ni daños personales, pero la acumulación del material y la inestabilidad del terreno mantienen la zona en alto riesgo.
De acuerdo con Provías Nacional, este derrumbe es “tres veces mayor” que el registrado días atrás, lo que complica el acceso de la maquinaria pesada para iniciar la remoción. El tránsito permanece suspendido y no existe pase vehicular desde la tarde del martes. Las autoridades indicaron que la vía podría seguir bloqueada hasta el día siguiente, dependiendo de la evolución del terreno y del avance en las labores de limpieza.

Trabajos y riesgo de desprendimiento
El Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) de Arequipa informó que el personal especializado permanece en la zona, aunque la caída constante de rocas dificulta la intervención. La prioridad es garantizar que las condiciones sean seguras para los operadores y que no haya nuevos deslizamientos mientras se ejecuta la remoción del material acumulado.
Las autoridades exhortaron a los viajeros a no intentar cruzar caminando la zona bloqueada debido al peligro que representa la inestabilidad del cerro. Señalaron que cualquier intento de atravesar el área podría interferir con el trabajo de las máquinas que operan en el lugar e incrementar el riesgo ante posibles desprendimientos adicionales. El llamado se extiende también a los transportistas, quienes fueron advertidos de evitar la ruta hasta que se restablezca el tránsito.

En Arequipa, las empresas de transporte interprovincial suspendieron temporalmente la venta de pasajes hacia el norte, a la espera de que la Panamericana Sur sea despejada. La interrupción mantiene paralizado un importante corredor vial para el traslado de pasajeros y mercancías, afectando la conectividad regional y generando preocupación entre los transportistas.
Impacto regional
El bloqueo total de la Panamericana Sur en el tramo Ático–Ocoña ha dejado incomunicadas rutas clave hacia Arequipa, Moquegua, Tacna y Lima. Cientos de vehículos permanecen varados en ambos extremos de la vía, mientras continúan las alertas por el riesgo de nuevos desprendimientos, especialmente tras las recientes lluvias que han debilitado el terreno. Los equipos de Provías Nacional continúan en la zona con maquinaria pesada, a la espera de que las condiciones permitan reanudar las labores de limpieza de manera segura.

Las autoridades reiteraron que el restablecimiento del tránsito podría tomar varias horas adicionales y recomendaron a los conductores buscar rutas alternas. Asimismo, insistieron en seguir únicamente la información oficial y evitar desplazarse hacia el área afectada, debido a que se trata de una zona de alto riesgo para los viajeros.
El COER Arequipa señaló que continuará monitoreando la situación y comunicará cualquier avance en el despeje de la vía. Mientras tanto, el corredor sur del país permanece en alerta ante un nuevo derrumbe que vuelve a poner en evidencia la vulnerabilidad de esta zona ante deslizamientos de gran magnitud.
