El Banco Central (BCRA) publicó ayer nuevos datos de su balance que indicarían que ya se concretó el préstamo de Estados Unidos a la Argentina por alrededor de US$2700 millones. Sin embargo, desde la entidad monetaria no hubo ningún comunicado oficial, a diferencia de lo que solía ocurrir cuando el país activaba un préstamo financiero o un swap de monedas con otra nación.
El Tesoro de Estados Unidos, por su parte, difundió hoy, viernes, información en la que ratifica que el 15 de octubre pasado le prestó al país el equivalente a US$872 millones en derechos especiales de giro (DEG, la moneda del Fondo Monetario Internacional), como parte del swap acordado.
“La información que se confirma es por la publicación oficial del Tesoro estadounidense. En el BCRA, la falta de transparencia sigue gozando de buena salud”, cuestionó el economista Christian Buteler.
La consultora Outlier apuntó en la misma dirección en su informe diario: “Se confirmó que se activó el swap de monedas con Estados Unidos. En una primera instancia, fue para permitir la salida de las posiciones en pesos del Tesoro estadounidense, lo que en la práctica funcionó como un adelanto del swap, y luego para el pago al FMI. Nuestros cálculos estiman la activación en US$2700 millones, pero son aproximaciones, porque no hay información oficial disponible. Mucho menos sobre las condiciones”.
“Dado que, cuando se anunció el swap, se aseguró que estas cuestiones se irían comunicando a medida que se activaran los tramos, y considerando que las elecciones ya quedaron varias semanas atrás, no se entiende por qué seguimos operando con estos niveles de opacidad”, añadió la consultora dirigida por Gabriel Caamaño y Juan M. Truffa.

Días atrás, el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, se excusó por no haber informado sobre la activación del nuevo swap de monedas pactado con el Tesoro estadounidense. Explicó que no lo hizo, para “respetar las cláusulas de confidencialidad” del acuerdo.
“Los movimientos no se reportan porque te arbitra el mercado. Es prudencial”, señaló, antes de relativizar la posibilidad de que se active otro tramo del swap en adelante. “Me parece que esa situación ya quedó atrás”, dijo, y destacó el nuevo equilibrio que muestra el mercado cambiario, impulsado por el cambio en las expectativas y el regreso de flujos financieros. Mencionó, además, la buena recepción que tuvieron las empresas locales en el exterior al colocar deuda, lo que les permitió captar más de US$3500 millones este mes.
El swap permitió al Banco Central evitar que la cotización del dólar superara el techo de la banda de flotación antes de las últimas elecciones, al aportar oferta al mercado y evitar así que se siguieran perdiendo reservas, en un contexto en el que la posición del Banco Central continúa siendo muy frágil.
