Mientras su hermana Sheila Casas se mantiene alejada del foco mediático tras su inesperada ruptura con Álvaro Muñoz Escassi después de 8 meses de amor -que ambos anunciaron por sorpresa el pasado viernes a través de un comunicado publicado en sus respectivas redes sociales- Óscar Casas ha disfrutado del desfile que ha paralizado el centro de Madrid este fin de semana para celebrar el Orgullo LGTBI+.
De lo más sonriente y divertido durante toda la jornada, aunque también se ha especulado que podría haber puesto punto y final a su relación con Ana Mena -rumores infundados ya que siguen tan felices como el primer día-, el actor bailó, charló y bromeó con la influencer Ares Teixidó, e incluso se hizo un tatuaje temporal en el cuello mientras recorría la capital en una de las carrozas del Orgullo.
Siempre discreto tanto con su vida sentimental como con la de sus hermanos, Óscar ha reaccionado a las preguntas de Europa Press sobre la ruptura de Sheila con Escassi cogiendo una pistola de agua y mojando al reportero con una sonrisa de oreja a oreja. «Yo muy bien, muchas gracias. Va todo muy bien gracias a Dios» ha expresado divertido, dejando en el aire cómo se encuentra su hermana.
De lo más cercano y amable con sus fans, el actor -que acaba de estrenar la serie ‘El gran salto’, basada en el ascenso y posterior caída a los infiernos del ex gimnasta olímpico Gervasio Deferr- tampoco ha querido pronunciarse sobre los rumores de crisis con Ana Mena, aunque su actitud deja entrever que son completamente falsos.