El acto de toma de posesión de Teresa Peramato como fiscal general del Estado marcó el inicio de su mandato con el anuncio de que Julio Cano Antón, procedente de la Fiscalía de Islas Baleares, ocupará el puesto de secretario técnico en la Fiscalía General del Estado, en reemplazo de Ana García de León. Este relevo, relacionado con una transformación institucional en curso, se dio durante una ceremonia en el Tribunal Supremo, donde Peramato centró su intervención en la lucha contra la violencia sexual, la defensa de la autonomía del Ministerio Público y la implementación de reformas procesales que acerquen la justicia a los ciudadanos, informó Europa Press.
En su discurso, la nueva fiscal general destacó la importancia de la especialización dentro de la carrera fiscal para garantizar la eficiencia y el rigor en el servicio público, según publicó Europa Press. Peramato agradeció la gestión de Ana García de León durante una etapa que describió como marcada por una gran actividad legislativa y doctrinal, y resaltó la experiencia y la trayectoria de Cano Antón en el ámbito fiscal. Este cambio se consideró uno de los primeros actos de gestión bajo la nueva dirección, dentro de una estrategia orientada a la cohesión y mejora institucional.
La gravedad de la violencia de género fue uno de los ejes centrales abordados por Peramato. La fiscal general actualizó la cifra de mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas, que asciende a 1.340 víctimas desde 2003, y advirtió que en lo que va del presente año ya se han registrado 45 muertes. En palabras recogidas por Europa Press, Peramato rindió homenaje a las mujeres fallecidas y convocó a la sociedad y a las instituciones a adoptar un posicionamiento claro frente al acoso y las agresiones contra la libertad sexual. Consideró indispensable un compromiso social firme que priorice la seguridad y los derechos de mujeres, niñas y niños. Según dijo, esta problemática presenta un reto considerable tanto para el Estado como para la sociedad civil, quienes deben emprender acciones decididas de respuesta.
Europa Press detalló que Peramato relacionó su postura en materia de violencia de género con su propia trayectoria profesional dentro de la Fiscalía, donde ha dedicado la mayor parte de su carrera a este ámbito. Se refirió a la Justicia como un servicio público orientado a la accesibilidad y mencionó la responsabilidad del sistema judicial español respecto a la confianza que en él deposita la ciudadanía.
Durante su intervención, también abordó los episodios recientes relacionados con el proceso penal contra Álvaro García Ortiz, su antecesor en la Fiscalía General, condenado a dos años de inhabilitación por revelación de secretos sobre Alberto González Amador, vinculado a la presidenta de la Comunidad de Madrid. Según consignó Europa Press, Peramato expresó la necesidad de restablecer la cohesión dentro de la Fiscalía para superar la huella que dejó este caso, y abogó por reforzar el trabajo conjunto y la colaboración entre los fiscales de todo el país.
La toma de posesión congregó a figuras que ocuparon anteriormente la jefatura de la Fiscalía General del Estado, entre ellos García Ortiz, Dolores Delgado, María José Segarra y Eduardo Torres-Dulce. De acuerdo con lo recogido por Europa Press, Peramato dedicó palabras de reconocimiento y gratitud a sus predecesores, destacando la contribución de cada uno al consolidar la institución sobre la que ahora asienta su proyecto.
En el ámbito interno, la fiscal general subrayó la labor de los 2.804 fiscales que conforman la carrera, y resaltó la importancia de órganos como el Consejo Fiscal y la Junta de Fiscales de Sala, destacando la relevancia de su criterio y experiencia en la orientación estratégica de la institución. Manifestó el propósito de consolidar un modelo de escucha, diálogo y búsqueda de consensos, perfilando a la Fiscalía como un colectivo con una misión común, según reportó Europa Press.
En materia de autonomía institucional, Peramato planteó la necesidad de fortalecer la Fiscalía en aspectos presupuestarios, económicos, digitales, formativos y organizativos. Europa Press reseñó que, para ella, este refuerzo garantizará una mejor representación de la diversidad social y permitirá mantener como prioridad el acceso a la justicia y la igualdad para todos los ciudadanos. Insistió en la importancia de adaptar la interpretación normativa a los cambios sociales y en compartir los desafíos que enfrentan tanto la institución como la sociedad contemporánea.
El programa anunciado por Peramato, según detalló Europa Press, fija como ejes centrales la protección de los derechos humanos y el impulso a la cooperación internacional. Destacó especialmente la lucha contra la violencia de género, la trata de personas, los delitos de odio y discriminación, así como la persecución de delitos medioambientales originados en el negacionismo del cambio climático. También incluyó el combate contra el narcotráfico, la corrupción y el fraude vinculados al sostenimiento del sistema de bienestar. Confirmó asimismo su intención de priorizar la protección de colectivos en situación de especial vulnerabilidad, como menores, ancianos, personas con discapacidad y migrantes.
En cuanto al modelo procesal penal, la fiscal general defendió ante Europa Press la necesidad de avanzar hacia la reforma legislativa que prevé atribuir a los fiscales la dirección de las investigaciones en materia penal, desplazando esa función a los jueces. Argumentó que este cambio podría dotar de mayor agilidad al sistema, fortalecer las garantías procesales y acercar la justicia a los ciudadanos, indicando que la Fiscalía está preparada para asumir ese papel de liderazgo en la investigación.
Al concluir su discurso, Peramato incluyó referencias personales y culturales, agradeciendo el apoyo de su familia y destacando la figura de su madre por su liderazgo y capacidad de trabajo. Citó a Miguel de Unamuno con la frase “el progreso consiste en renovarse” y mencionó a Eleanor Roosevelt para subrayar la importancia de mantener la confianza en los propios ideales. Europa Press enfatizó que la nueva fiscal general reiteró la centralidad de la cohesión interna y del servicio público, considerándolos principios vinculados a las expectativas y necesidades de la sociedad española.
