El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha asegurado este domingo haber nombrado «sin ningún cálculo político» al exministro de Exteriores Álvaro Leyva que habría intentado, presuntamente, deponerlo con ayuda de Estados Unidos.
«Durante meses he sido víctima de la injuria del señor Leyva», ha denunciado el mandatario en una publicación en X en la que ha querido «simplemente responder a lo que consideraba un acto de venganza bárbaro, canalla, de alguien que simplemente había ayudado de corazón». «Le di el puesto de canciller a Leyva porque pensé, sin ningún cálculo político, que se lo merecía al final de su vida», ha subrayado.
Leyva, inhabilitado durante diez años desde noviembre de 2024 por un caso de corrupción vinculado a la licitación para la emisión de pasaportes, publicó en abril una carta en la que achacaba a Petro un «problema de drogadicción» que, aseguró, comparte su jefe de gabinete y titular del Interior, Armando Benedetti, a quien tachó de «enfermo». El exministro también acusó a su sucesora, la ministra de Exteriores, Laura Sarabia, de satisfacerle al mandatario «algunas necesidades personales».
Petro, por su parte, ha calificado las acusaciones de Leyva como «suposiciones de chisme de corredor» y ha expresado su malestar con la presencia del hijo del exministro en múltiples eventos internacionales, en los que lo ha descrito como «un «lobbista» de negocios aprovechando el cargo público de su padre».