La detención por error de una inmigrante sin papeles en Dalton, Georgia, terminó con una precipitada decisión por parte del agente que la arrestó. El hecho ocurrió el 5 de mayo, cuando la alumna universitaria Ximena Arias-Cristobal fue parada por un presunto giro indebido y arrestada por conducir sin licencia válida. Poco después, fue trasladada al establecimiento del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en Stewart, Georgia.
La medida que tomó el agente tras arrestar por equivocación a la migrante
Un portavoz oficial de la ciudad de Dalton confirmó a Atlanta News First que Leslie Allen O’Neal, el agente policial implicado en el incidente, presentó su renuncia.
Según precisó el medio, la decisión se produjo luego de que se evidenciara que O’Neal había detenido por equivocación a un automóvil que no coincidía con el que realmente se buscaba. Este error desencadenó una cadena de eventos que culminó con el arresto de una joven universitaria indocumentada por parte de las autoridades migratorias.
El video que muestra que el arresto fue por equivocación
Atlanta News First informó que el registro visual de las cámaras del patrullero mostró claramente que la joven no era la conductora buscada. Como resultado, se retiraron los cargos en su contra. Sin embargo, Arias-Cristobal permaneció detenida durante cerca de dos semanas, hasta que un juez de inmigración le otorgó una fianza de 1500 dólares.
La joven fue liberada el viernes a la madrugada y recibió el abrazo de su familia tras días de incertidumbre. “No se lo deseo ni a mi peor enemigo”, dijo a ANF. “No saber qué iba a pasar conmigo, saber que podía ser enviada a un país que no conozco, separada de mi familia… fue devastador”, agregó.
Su caso migratorio sigue abierto: Arias-Cristobal deberá esperar hasta 2026
Aunque ya salió del centro de detención, la situación migratoria de Ximena Arias-Cristobal aún no se resolvió. La joven permanece bajo supervisión federal y su próxima audiencia ante un juez podría fijarse recién para mediados de 2026, según declaró su abogado Charles Kuck al medio local WTVC.
Arias-Cristobal ingresó a Estados Unidos desde Ciudad de México en 2010, cuando tenía solo cuatro años, junto a sus padres. Reside desde entonces en Georgia y cursa estudios en Dalton State College. Sin embargo, como su entrada al país norteamericano fue posterior a la fecha de corte del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés) no califica para acceder a ese beneficio.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) indicó que la joven no posee solicitudes activas ante el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (Uscis, por sus siglas en inglés) y que permanece en el país norteamericano de forma no autorizada.
En una publicación en X, el DHS afirmó que tanto Arias-Cristobal como su padre “deben enfrentar las consecuencias” de su situación y ofreció un plan de salida voluntaria con asistencia económica y pasaje sin costo. La agencia advirtió que, si no aceptan esa opción, serán deportados sin posibilidad de reingreso.
José Francisco Arias-Tovar, padre de Ximena, fue arrestado dos semanas antes que su hija por conducir sin licencia y a exceso de velocidad. Posteriormente, fue transferido a custodia del ICE y, según informó WTVC, ya se encuentra en libertad bajo fianza.