Bruselas, 26 may (EFE).- Polonia, país que preside el Consejo de la Unión Europea este semestre, confía en que los Veintisiete den con una solución para las importaciones de Ucrania que no perjudique a los agricultores de los Estados miembros del Este, dijo este lunes en conferencia de prensa su ministro de Agricultura, Czeslaw Siekierski.
El ministro polaco reconoció la «enorme importancia» que tiene para Ucrania obtener financiación para armamento y otros medios de defensa y aseguró que todos los países de la UE están a favor de apoyar a ese país, pero hizo hincapié en que «no puede ser que los agricultores sean los que tengan que asumir los costes».
«Creo que la UE tiene la posibilidad de negociar para que mi país y otros no sufran los perjuicios que hemos sufrido», señaló Siekierski en rueda de prensa al término de la reunión.
El ministro español de Agricultura, Luis Planas, aseguró este lunes que va a pedir a la Comisión Europea (CE) mecanismos para apoyar a Ucrania con la importación de sus productos ante la invasión rusa.
«Por parte de España, plantearemos a la Comisión que se tienen que buscar mecanismos para conseguir efectivamente apoyar a Ucrania en esta difícil situación», dijo Planas hoy a su llegada a la reunión.
Recordó que Ucrania es un proveedor de cereales y oleaginosas «importante no solo para algunos países europeos como España, sino también para el resto del mundo».
Planas admitió que sobre todo los Estados miembros colindantes con Ucrania se encuentran y plantean «una dificultad derivada de la afectación a sus mercados agrarios».
«Pero yo creo que no hay que olvidar lo que supone en sí la situación de Ucrania, invadida injustamente e ilegalmente por parte de Rusia hace ya varios años, que se encuentra en una guerra y que por tanto tenemos que darle un apoyo político», expuso.
Los ministros de la UE abordaron en un Consejo la situación de los mercados agrarios, en particular el impacto derivado de la invasión rusa de Ucrania a gran escala en 2022.
Desde el inicio de la guerra, la UE suspendió los aranceles y cuotas a las importaciones de productos ucranianos como medida de apoyo a Kiev frente a la guerra.
No obstante, los agricultores y ganaderos del este de Europa en particular se han quejado los últimos años por el incremento de importaciones agroalimentarias ucranianas que se quedaban en sus países y se vendían a precios más bajos.
La actual suspensión de aranceles y cuotas a Ucrania vence el próximo 5 de junio, y la CE no tiene previsto extenderla más allá.
En su lugar, el Ejecutivo comunitario pretende implementar una solución a largo plazo surgida de la revisión de la Zona de libre comercio profunda y amplia entre la UE y Ucrania, parte del acuerdo de asociación entre los Veintisiete y Kiev.
Ante la posibilidad de que esa nueva solución no esté lista para el 6 de junio, la Comisión Europea ha preparado medidas transitorias, por si es necesario llegar a aplicarlas.
Además de ese asunto, los titulares europeos debatieron este lunes la visión para la agricultura y la alimentación presentada por la Comisión Europea y las normas sobre el transporte de ganado en la UE.
Bruselas informó también a los países sobre el reciente paquete de simplificación propuesto, que tuvo en general una buena acogida.
Durante el almuerzo, los ministros de agricultura debatieron la futura Política Agrícola Común (PAC). EFE