La primera medicina que tiene el cuerpo es la alimentación, ya que la incorporación de distintos nutrientes a través de la comida es una de las claves para mantenerse sano. Dentro de la amplia variedad de vitaminas y minerales que se deben incorporar, el magnesio se destaca de los demás gracias a su crucial aporte para procesos vitales del organismo.
El magnesio tiene un papel fundamental en más de 300 reacciones bioquímicas y ayuda a mantener el funcionamiento normal de músculos y nervios. Además, brinda soporte al sistema inmunitario y mantiene constantes los latidos del corazón, según explican los investigadores del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.
Como si fuera poco, este nutriente también ayuda a que los huesos permanezcan fuertes, previene la osteoporosis y tiene un rol crucial en ajustar los niveles de glucosa en la sangre, que es la fuente de energía necesaria para vivir. Además, ayuda a formar proteína, masa ósea y ADN (el material genético presente en las células).
Además de ayudar en el fortalecimiento y el rendimiento de los músculos, tiene un rol clave en la prevención y el alivio de calambres, ya que su administración puede mejorar la absorción de glucosa y limitar la acumulación de lactato en el músculo esquelético, lo que reduce el dolor después de la contracción muscular.
Hay investigaciones actuales que también hablan de la intervención del magnesio en la prevención y manejo de patologías como presión arterial alta, enfermedades cardíacas y diabetes. En general, la dieta de muchas personas no aporta las cantidades de este mineral necesarias, según las recomendaciones; por ejemplo, los hombres mayores de 70 años y las mujeres adolescentes tienden a consumir poco magnesio por su alimentación.
Este nutriente se puede encontrar naturalmente en varios alimentos de fácil incorporación al día a día. Por eso, es importante mantener una dieta saludable y llevar una vida sana.
El listado con los alimentos que tienen grandes aportes de magnesio
- Hortalizas de hojas verdes (como la espinaca, acelga)
- Frutas (como bananas, damasco y palta)
- Nueces
- Arvejas y porotos
- Semillas
- Derivados de soja (como harina de soja y tofu)
- Granos enteros (como arroz integral y mijo)
- Leche y yogur
Si bien es fácil mantener un nivel suficiente de magnesio en la dieta, y es poco común que las personas presenten una verdadera deficiencia de este mineral, los síntomas asociados a su carencia tienen que ver con presentar demasiada excitabilidad, debilidad muscular y somnolencia.
La falta de magnesio se suele ver en gente que consume alcohol en exceso o en aquellas personas cuyo organismo lo absorbe menos porque tienen enfermedades gastrointestinales o cirugías, diabetes tipo 2 o porque son adultos mayores.
Por eso, este mineral se encuentra disponible en suplementos multivitamínicos y dietéticos que se venden en farmacias y comercios. Las presentaciones comerciales son fácilmente absorbidas por el cuerpo y vienen en distintos formatos: el aspartato de magnesio, citrato de magnesio, lactato de magnesio y cloruro de magnesio.
En personas sanas, los riñones se encargan de eliminar el exceso de magnesio a través de la orina. No obstante, no se debe superar el límite máximo proveniente de suplementos dietéticos y medicamentos porque puede ser perjudicial para el organismo.