Los presidentes de Rusia y de Estados Unidos, Vladimir Putin y Donald Trump, no hablaron en su reunión del viernes en Alaska de un futuro encuentro a tres bandas donde estuviese también presente el mandatario de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha reconocido el asesor del Kremlin Yuri Ushakov.
Zelenski, que en estos últimos días ha dejado claras sus líneas rojas de cara a una hipotética negociación, volvió a deslizar horas antes de la cumbre que el cara a cara entre Putin y Trump no podía ser en ningún caso definitivo, sino un primer paso para una nueva reunión de alto nivel «en un formato trilateral», es decir, con Kiev ya en la mesa.
Sin embargo, ni Putin ni Trump se han comprometido en público a introducir este formato y se han limitado a plantear una posible segunda reunión de nuevo a nivel bilateral. El mandatario ruso ha propuesto en un tono informal que la próxima ubicación sea Moscú, algo que Trump no ha rechazado ante los medios.
Ushakov, que formaba parte de la delegación rusa, ha evitado poner fecha o lugar a un posible segundo cara a cara entre Putin y Trump, según las declaraciones recogidas por las agencias oficiales rusas.
Entretanto, Putin ha emprendido ya rumbo de vuelta a Moscú, si bien al igual que hiciese a la ida ha aprovechado para hacer escala en el extremo este de Rusia. En esta ocasión, ha parado en el distrito autónomo de Chukotka, con el objetivo de verse con autoridades locales.