El primer ministro polaco, Donald Tusk, anunció, tras la violación del espacio aéreo por parte de drones rusos, que invocará el artículo 4 del Tratado de la OTAN que contempla que los aliados “se consultarán cuando, a juicio de cualquiera de ellos, la integridad territorial, la independencia política o la seguridad de cualquiera de las partes fuese amenazada2.
Tusk dijo ante el Parlamento que la invocación del artículo 4 “es solo el principio” y subrayó que espera un “gran apoyo de los aliados ante “la confrontación que Rusia ha declarado al mundo libre”, en referencia a la oleada de drones que este país lanzó contra Polonia
El jefe de Gobierno confirmó que durante la pasada madrugada se registraron 19 violaciones del espacio aéreo polaco por parte de drones rusos y aseguró que se derribaron tres de los aparatos, el último de ellos a las 6:45.
El líder polaco señaló además que “por primera vez durante esta guerra los aparatos no provenían de Ucrania, sino de Bielorrusia”, y subrayó que las incursiones “no puede decirse que fueran el resultado de errores, pérdida de control de drones o pequeñas provocaciones rusas”.
“Por primera vez, una parte significativa de estos drones sobrevoló Polonia directamente desde Bielorrusia”, señaló Tusk.
El primer ministro señaló que aunque “no hay motivos para afirmar hoy que nos encontramos en estado de guerra no hay duda de que esta provocación es incomparablemente más peligrosa desde el punto de vista de Polonia que las anteriores.”
Por su parte, el presidente polaco, Karol Nawrocki, calificó los hechos como un “momento sin precedentes” en la historia de la OTAN y en la reciente de Polonia, y anunció la posible activación del Artículo 4 del Tratado del Atlántico Norte.
Los artículos 4 y 5 de la OTAN
El artículo 5 de la OTAN, que establece la obligatoriedad de un Estado miembro a responder a un ataque contra un tercero, ha vuelto a acaparar todas las miradas después de que el Gobierno de Polonia haya acusado a Rusia de violar su espacio aéreo durante un ataque contra Ucrania.
Esta breve incursión, que ha hecho saltar las alarmas a nivel internacional, ha reabierto el debate sobre la posibilidad de invocar el artículo 5 del tratado de la Alianza después de que Polonia se haya convertido en el primer país de la OTAN en derribar drones rusos sobre su territorio, según ha afirmado el propio primer ministro polaco, Donald Tusk.
La situación ha llevado al Gobierno de Polonia a convocar una reunión de urgencia para analizar una situación que ha tildado de “agresión” y que ha provocado el cierre del aeropuerto internacional de Varsovia, situado en la capital, así como el de la localidad de Lublin, en el este del país.
Polonia considera que se trata de un ataque “deliberado” y descarta cualquier incursión accidental. Apelar al citado artículo podría llevar a la temida extensión del conflicto más allá de las fronteras ucranianas.
El texto, que establece un acuerdo entre los países miembro de la Alianza frente a un “ataque armado contra uno o más de ellos, tanto en Europa como en América del Norte”, indica que una agresión de este tipo sería considerada “un ataque dirigido contra uno de los países miembro o contra todos ellos”.
En consecuencia, apunta el documento, cada Estado, “en ejercicio del derecho de legítima defensa individual o colectiva reconocido por el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, ayudará a la parte o partes atacadas”, por lo que avala la adopción -de forma individual y de acuerdo con el resto- de las “medidas que juzgue necesarias, incluido el uso de la fuerza armada, para restablecer la seguridad”.
“Cualquier ataque armado de esta naturaleza y todas las medidas adoptadas en consecuencia serán inmediatamente puestas en conocimiento del Consejo de Seguridad. Estas medidas cesarán cuando el Consejo de Seguridad haya tomado las disposiciones necesarias para restablecer y mantener la paz y la seguridad internacionales”, indica el propio tratado, que no obliga sin embargo a una intervención militar conjunta a gran escala.
El artículo 4
Asimismo, la OTAN también establece en su artículo 4 -que ha sido invocado hasta en seis ocasiones- la necesidad de mantener consultas previas cuando así lo solicite una de las partes en caso de que su integridad territorial o independencia política “se vean amenazadas”, tal y como ha pedido ya Varsovia.
Tusk ha esgrimido que lo sucedido es “una lección importante para todos” y ha dicho estar “listo para repeler tales provocaciones y ataques”. Estamos bien preparados, la situación es grave y hoy nadie duda de que debemos prepararnos para diversos escenarios», ha destacado.
El mandatario ha hablado de “noche dramática” en el espacio aéreo del país y ha resaltado que “lo más probable” es que se trate de “una provocación a gran escala”, si bien ha hecho hincapié en la importancia de seguir adelante con las consultas con los aliados.
Este foro es el Consejo del Atlántico Norte (NAC, por sus siglas en inglés), que es a su vez el principal órgano de toma de decisiones en el seno de la OTAN. Cualquier miembro de la organización puede invocar formalmente el artículo 4, que sería la antesala de alguna decisión o acción conjunta en nombre de la OTAN y que fue invocado por última vez tras la invasión militar rusa de Ucrania a petición de Estonia y en coordinación con Letonia, Lituania y Polonia.
El artículo 6, por su parte, es el encargado de definir el concepto de ataque armado, pero no estipula los pasos a seguir ni la posible dimensión de esa virtual respuesta conjunta.
Garantías de seguridad para Ucrania
No es la primera vez que la importancia del artículo 5 –aplicado únicamente en el año 2001 tras los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos– es abordada a nivel internacional durante las consultas entre líderes internacionales para tratar de poner fin a la guerra en Ucrania.
El pasado mes de agosto, buena parte de los líderes europeos reunidos para analizar la situación sobre el terreno apuntaron a la posibilidad de utilizar este texto como punto de partida para diseñar las garantías de seguridad para Kiev que tanto ha reclamado el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, y que constituye para él un requisito indispensable en el marco de las negociaciones con Moscú.
La Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, aseguró tras el encuentro en Alaska con su homólogo ruso, Vladimir Putin, que existía la posibilidad de ofrecer este tipo de garantías a Kiev sin que este pasara a formar parte de la Alianza, si bien no ofreció detalles al respecto.
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha advertido este miércoles de que los aliados “están decididos a defender cada centímetro del territorio” tras el derribo de varios drones rusos que violaron el espacio aéreo polaco esta madrugada.
“Lo que está claro es que la violación de anoche no es un incidente aislado”, ha afirmado Rutte en una comparecencia desde la sede de la OTAN en Bruselas después de que el Gobierno polaco haya anunciado que invocará el artículo 4 del Tratado del Atlántico Norte para formalizar consultas con el resto de aliados de la OTAN.
El secretario general ha informado de que el Consejo del Atlántico Norte se ha reunido en la mañana de este miércoles para abordar la situación a la luz de la solicitud de consultas presentada por Polonia en virtud del artículo 4 del Tratado.
Rutte ha explicado que se está llevando a cabo una evaluación completa del incidente y, aunque ha evitado prejuzgar el resultado de la investigación, ha criticado que “ya sea intencionado o no, es absolutamente imprudente” y “peligroso”.
“Los aliados han expresado su solidaridad con Polonia y han condenado el comportamiento imprudente de Rusia”, ha indicado el ex primer ministro de Países Bajos, quien ha instado al presidente ruso, Vladimir Putin, a “dejar de violar el espacio aéreo aliado”.
Al respecto, Rutte ha garantizado que la OTAN seguirá “de cerca la situación a lo largo del flanco oriental”, al tiempo que ha defendido que las defensas aéreas aliadas “están continuamente preparadas”.
(Con información de EFE y Europa Press)