El Instituto Comercial Rancagua tiene en su frente una faja de clausura y la conmoción en Pergamino -partido en el que está esta localidad- es enorme por estas horas, después de que explotara un experimento que simulaba ser un volcán en una feria de ciencias en esa institución, el jueves por la noche. Por el hecho hubo 17 personas heridas pero, sobre todo, una niña de 10 años -que se encuentra en grave estado de salud- y una docente de 45 años -que evoluciona de manera favorable-.
La nena fue derivada en helicóptero desde Pergamino hasta el Hospital Garrahan, donde se encuentra internada en terapia intensiva. Según información que aportó el diario La Opinión, tiene quemaduras severas en su rostro y una esquirla que ingresó por su ojo y afectó su cerebro, por lo que quedó en estado crítico con riesgo de vida.
Como una forma de dar apoyo a la familia, que se encuentra junto a ella a la espera de novedades en el hospital, tanto en la ciudad de Pergamino como en Rancagua pidieron cadenas de oración. “No importa la religión de la que seas. Utilicemos nuestras redes para maximizar la energía y que le llegue a Cata [como la llaman a la niña] y a su familia, que atraviesan este terrible episodio”, indicaron.
Por su parte, la docente afectada, siempre de acuerdo al mismo medio, también sufrió quemaduras y habría perdido el ojo izquierdo, aunque evoluciona de manera favorable después de ser sometida a dos cirugías que permitieron mejorar su cuadro clínico.
“Mi esposa está bien, está evolucionando bien, gracias a Dios. Una de las cirugías fue más compleja, en el brazo; y, la otra, en el rostro, en el surco nasogeniano, fue un poco menos complicada. Se queda una noche internada por precaución y después se verá”, dijo la pareja de la docente, que está en el Hospital San Felipe de San Nicolás, derivada desde el Hospital San José de Pergamino.
En tanto, ya camina a nivel judicial una causa para tratar de determinar qué fue lo que pasó en la feria para que el volcán generara una explosión de tal magnitud. El expediente lo lleva el fiscal Fernando Pertierra, de la Unidad Funcional y Juicio N°1. El colegio está fajado con cintas de seguridad porque el magistrado ordenó peritajes.
De momento, en base a información de La Opinión que surgió de los primeros informes que se recabaron en la escuela, la versión más fuerte dice que explosión se habría producido por la combustión de materiales inflamables que se usaron para recrear el volcán. La intención del fiscal es determinar cuáles fueron esos componentes y si hubo algún tipo de manipulación que derivó en este estallido desmedido.
Ese día de la exposición, la onda expansiva afectó a niños y adultos que participaban de la feria, además de a la nena y a la docente que fueron las más afectadas. En total se contabilizaron 17 heridos con dolores, contusiones, heridas y signos de intoxicación.
Los primeros auxilios los realizaron Bomberos Voluntarios de Arroyo Dulce, que habían ido al evento, y después llegaron ambulancias del SAME y de Medicar (un servicio privado que opera en la zona).
La Justicia también comenzó con las entrevistas. Ya le tomaron declaración a la directora del Instituto Comercial Rancagua, al profesor de Química que tenía a cargo el proyecto del volcán y a la representante legal del colegio, que es privado. En el mismo edificio funciona una escuela pública, la Primaria N°54.