El soufflé de zanahorias es una preparación que se destaca por su textura liviana y su sabor delicadamente dulce, ideal para jerarquizar cualquier menú cotidiano a partir de un vegetal sencillo. Gracias a su aspecto esponjoso, suele resultar atractivo para incorporar vegetales en la dieta diaria, siendo una opción recomendable tanto para niños como para adultos y perfecta como entrada diferente o acompañamiento.
Originario de la cocina francesa, el soufflé es conocido por la incorporación de claras batidas a nieve, logrando así ese característico volumen y ligereza. La versión de zanahorias es especialmente valorada en Argentina por su color vibrante y sabor suave, lo que la convierte en una alternativa práctica para eventos especiales o comidas familiares. Generalmente, se sirve tibio, y puede acompañarse con carnes, aves o ensaladas frescas.
Receta de soufflé de zanahorias
La elaboración comienza cocinando las zanahorias hasta que queden bien tiernas, para luego procesarlas hasta obtener un puré homogéneo. Se incorpora luego las yemas, queso rallado y crema de leche, prescindiendo de la tradicional salsa bechamel para agilizar el proceso. El punto crucial es la integración cuidadosa de las claras batidas a punto de nieve, lo que garantiza una textura aireada y liviana una vez horneado.
La receta es sencilla y puede prepararse con antelación, manteniéndose en heladera hasta el momento de llevar al horno. Resulta versátil, ya que puede presentarse como entrada caliente, guarnición o incluso como plato principal liviano cuando se acompaña de una ensalada fresca.
Tiempo de preparación
Tiempo total estimado: 40 minutos.
- Preparación de ingredientes y cocción de zanahorias: 15 minutos
- Procesado y mezclado: 10 minutos
- Cocción en horno: 15 minutos
Ingredientes
- 500 g de zanahorias
- 3 huevos (claras y yemas separadas)
- 50 g de queso rallado (tipo parmesano)
- 200 ml de crema de leche o leche entera
- 1 cucharada de manteca (más extra para el molde)
- Sal y pimienta a gusto
- Nuez moscada (opcional)
- Pan rallado (para el molde)
Cómo hacer soufflé de zanahorias, paso a paso
- Pelar y cortar las zanahorias en rodajas. Cocinarlas en agua hirviendo salada hasta que estén muy tiernas (aproximadamente 10-12 minutos). Escurrir completamente.
- Procesar las zanahorias cocidas hasta obtener un puré liso. Dejar entibiar.
- Batir las claras a punto de nieve firme y reservar.
- Mezclar el puré de zanahorias con la manteca, las yemas, el queso rallado, la crema de leche y condimentar con sal, pimienta y nuez moscada.
- Incorporar las claras batidas a la mezcla utilizando movimientos envolventes, procurando no perder el aireado.
- Enmantecar un molde apto para horno y espolvorear con pan rallado.
- Verter la preparación en el molde y llevar a horno precalentado a 180ºC durante 15 minutos, o hasta que el soufflé suba y se vea dorado en la superficie.
- Servir de inmediato.
¿Cuántas porciones rinde esta receta?
Rinde entre 4 y 6 porciones, según se utilice como entrada o como acompañamiento.
¿Cuál es el valor nutricional de cada porción de esta receta?
Por cada porción, el soufflé de zanahorias aporta aproximadamente:
- Calorías: 140
- Grasas: 8 g
- Grasas saturadas: 4 g
- Carbohidratos: 10 g
- Azúcares: 6 g
- Proteínas: 5 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
¿Cuánto tiempo se puede conservar esta preparación?
El soufflé de zanahorias puede conservarse refrigerado hasta 2 días, siempre bien cubierto. Para disfrutar su textura esponjosa, se recomienda consumirlo recién hecho, aunque puede recalentarse en horno suave antes de servir.