El Gobierno de Reino Unido ha resuelto que ampliará su programa de entrenamiento para soldados ucranianos en un nuevo intento de ayudar a Kiev a fortalecer su Ejército mientras continúan los debates entre las autoridades ucranianas, europeas y estadounidenses sobre las garantías de seguridad vinculadas a un posible acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania.
«Frente a los continuos ataques rusos, debemos situar a las Fuerzas Armadas de Ucrania en la posición más fuerte posible. Y mientras continúa el impulso hacia la paz, debemos convertir a los ucranianos en el elemento disuasorio más fuerte posible para asegurar esa paz futura», ha argumentado el secretario de Defensa británico, John Healey, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias Boomberg.
Así, según Defensa, el programa Interflex –enfocado en la capacitación en combate y liderazgo– se mantendrá activo al menos hasta finales de 2026, con el fin de que «Ucrania pueda defenderse hoy y disuadir mañana». «Seguiremos intensificando nuestro apoyo junto a los aliados», ha insistido Healey.
Una «Coalición de Voluntarios» encabezada por Reino Unido y Francia ha delineado planes para enviar una fuerza militar multinacional a territorio ucraniano como medida disuasoria frente a posibles agresiones tras la firma de un tratado de paz. De acuerdo con el Ministerio de Defensa, en los encuentros llevados a cabo en los últimos meses han participado más de 200 expertos en planificación militar, con contribuciones provenientes de cerca de 30 países.
La primera etapa de este proyecto contempla el fortalecimiento del ejército ucraniano mediante formación adicional y apoyo en refuerzos, según reportó esta semana Bloomberg. Estas tropas contarían con el respaldo de una fuerza multinacional, compuesta principalmente por efectivos europeos, que se establecería en zonas alejadas del frente de batalla dentro de Ucrania.
El plan también incluye una posible «barrera de contención» proporcionada por Estados Unidos, que abarcaría intercambio de inteligencia, vigilancia fronteriza, suministro de armas y posiblemente sistemas de defensa aérea.
En total, desde el inicio del programa Interflex, más de 50.000 reclutas ucranianos han sido entrenados en territorio británico, de acuerdo con los datos del Ejecutivo del país.