Puntero de la Zona B del torneo Clausura, con 22 puntos. Equipo que sumó más unidades en diez fechas, uno por delante de su escolta Vélez, cuatro arriba de River y cinco por encima de Unión, que lidera la Zona A. Quinto en la tabla anual, la que determina las plazas para las copas internacionales: hoy, en puestos de Copa Sudamericana.
Un invicto de seis partidos, con cinco victorias en cadena, marca que jamás registró en primera. Tercer equipo, junto con San Lorenzo y por detrás de Vélez y de Rosario Central, con menos goles en contra: seis, y la mitad los sufrió en un solo cotejo, frente a San Martín, en San Juan. Récord de 25 partidos sin derrotas, con 14 éxitos y 11 empates en el estadio Guillermo Laza, donde no pierde desde el 24 de mayo del año pasado…
Las estadísticas reflejan la sólida y sorprendente campaña de Riestra, un actor de reparto que se convirtió en protagonista en el fútbol argentino. El golpe de escena en el Monumental, al superar por 2 a 1 a River, resalta aún más el presente, aunque el Malevo desde hace un tiempo da golpes de martillo sin hacer ruido: de los denominados cinco clubes grandes, solo Racing tiene récord positivo en el historial en los duelos mano a mano.
Un equipo sin figuras, sin estrellas. Un grupo donde la disciplina, el orden y reconocer cuáles son las virtudes y las falencias son los fundamentos para trazar estrategias. La prioridad, cuando se proyectó la temporada, no encerró planes faraónicos. Conservar la categoría fue el objetivo, aunque ahora los números señalarán que se trató de una meta modesta o de escasa ambición. Esa es la regla: cumplir una misión y recién entonces encarar otro reto.
Riestra formalizó el desafío siete fechas antes de terminar el calendario, después de ganarle 1 a 0 a Gimnasia y Esgrima La Plata, la semana pasada. “Me da un orgullo tremendo, por eso quiero felicitar a los jugadores. Nuestro próximo paso es estar entre los 10 mejores promedios, porque eso nos va a llevar a que el año que viene el club siga trabajando en su proyecto. Nada nos puede llevar a la confusión”, comentó el entrenador Gustavo Benítez, que tiene identidad plena con el club.
El DT reemplazó a Cristian Fabbiani cuando el Ogro recibió el llamado para dirigir a Newell’s, pero antes jugó nueve años con la camiseta del Malevo; en diciembre de 2024 se retiró como futbolista y al mes siguiente tomó las riendas del plantel.
El modelo del jugador de Riestra es el futbolista del Ascenso. Y no es una idea despectiva, es una pauta tácita que se estableció y que al equipo le ofreció resultados. Desde su arquero y símbolo, Ignacio Arce, al capitán Milton Céliz o el goleador Jonathan Herrera, los tres tienen un recorrido generoso y por varios clubes de Segunda o experiencias en el exterior en ligas de segundo orden o mercados emergentes: el guardavalla y quien lleva la cinta en el brazo izquierdo jugaron en Chile; el artillero, en Venezuela, Chile y Malasia.
En la última ventana de pases se incorporó Mariano Barbieri –rescindió con Rosario Central– y desde el club cuando indagaron sobre el zaguero la consulta apuntó a un excompañero que el defensor tuvo en Defensores de Belgrano. “Por la manera en que jugamos es más fácil adaptar a un jugador del ascenso a uno que jugó en River o en Boca, que nos llevaría un proceso de cinco o seis meses hasta que se amolden a lo que somos”, resaltó Benítez, antes de jugar con River, en una charla con ESPN.
La consigna de sumar pocos refuerzos, pero que logren la sintonía que tiene el plantel, es un mantra en Villa Soldati. “No tenemos ego, lo cortamos enseguida. Los jugadores que vienen saben que tienen que seguir creciendo y mejorando día a día para equiparar a la mayoría de los jugadores rivales. Entendemos que el 95% de nuestros rivales tienen más jerarquía, mejores jugadores y mejor pie que nosotros, por eso tenemos que equiparar desde otro lado, desde lo físico”, argumentó Benítez.
En un fútbol tan profesionalizado, donde las comodidades de las instalaciones para entrenar o los lugares de concentración deben cumplir con estándares que en oportunidades rozan la suntuosidad, la mayoría de los jugadores de Riestra tienen emprendimientos que robustecen la economía. En una publicación en redes sociales que hizo la cuenta del club se conoció qué rubro o qué actividad explota cada uno: Arce repartió anteayer alfajores en el Monumental y la promoción de la golosina está asociada a que la marca Marley se convirtió en sponsor del equipo. Herrera es dueño de un gimnasio en Ituzaingó; Franco Fagúndez comercializa perfumes importados; Yonatan Goitía vende ropa y Nicolás Caro Torres, delicias dulces junto a su pareja; el arquero Jaime Barceló tiene su propia marca de guantes y Juan Cruz Randazzo construyó en Luján un complejo de canchas de fútbol cinco…
Quien más arrancó su mañana así?🤣 pic.twitter.com/nvgUzSfYkf
— Deportivo Riestra (@prensariestra) September 24, 2025
Más de la mitad del plantel tiene un ingreso extra y la razón de que son futbolistas que se suman desde el ascenso empuja a tener que explorar más allá del rol de jugador. El cuerpo técnico mantiene charlas individuales y también grupales para concientizar que la carrera profesional puede ser corta y que deben encontrar alternativas que generen un sustento económico. Jugar en primera mejoró el ingreso de cada uno, aunque el presupuesto que tiene Riestra está muy lejos de convertir a un futbolista en un millonario. El cálculo estimativo, según los últimos datos que filtró la institución, señala que la cifra destinada al plantel profesional asciende a 1.500.000 dólares anuales.
En su segunda temporada en la categoría, Riestra es protagonista en la cancha y con la campaña revierte la imagen con la que ascendió a primera. Las polémicas, los fallos arbitrales favorables y el aporte externo del empresario y abogado Víctor Stinfale, aunque legalmente no existen contratos que liguen al club a una Sociedad Anónima Deportiva, un foco, al igual que las acciones más emparentadas al marketing –y peligrosamente a las apuestas– que se ejecutaron con el debut de Mateo Apolonio, de 14 años, o del streamer Iván Buhajeruk (Spreen), titular y reemplazado al minuto de juego, ante Vélez.
De las controversias al golpe en el Monumental, de afirmarse en primera a soñar con una participación internacional… El nuevo mundo de Riestra.