El Kremlin ha acusado este miércoles al canciller alemán, Friedrich Merz, de «obstaculizar» el proceso de paz en Ucrania con la entrega de más ayuda militar, después de una serie de declaraciones sobre el fin de las restricciones al uso de misiles de largo alcance y al desarrollo conjunto de este tipo de proyectiles.
«Esto no es más que otra provocación», ha dicho el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, para quien las autoridades alemanas están de nuevo intentando «obligar a los ucranianos a seguir luchando» en lugar de fomentar un proceso de negociación.
«Es una tendencia muy peligrosa, es una postura muy irresponsable la que está adoptando Alemania. Espero que no se convierta en una obstáculo serio para los futuros intentos de alcanzar una solución pacífica», ha dicho Peskov, según recoge la agencia de noticias Interfax.
En las últimas horas, con motivo de la visita del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, a Berlín, el canciller alemán se ha comprometido a colaborar con Kiev en el desarrollo de misiles de largo alcance, un tipo de proyectiles que Berlín había restringido a su socio a fin de evitar una mayor escalada.
Ahora, Alemania parece que además levantará junto a otros países como Francia las restricciones en materia de alcance, según el mismo canciller Merz adelantó esta semana para permitir que Ucrania pueda golpear objetivos militares rusos en retaguardia.