Vender tamales en Estados Unidos fue la actividad con la que Alejandro Marín reorientó su trayectoria laboral tras migrar desde Colombia. En 2020, consolidó un emprendimiento que, con el tiempo, se transformó en una red de restaurantes con más de 90 empleados y presencia en dos estados.
¿Cómo surgió su emprendimiento en Nueva York?
Marín había trabajado en empresas multinacionales de electrodomésticos en Colombia. Buscaba mejorar su nivel de inglés para crecer profesionalmente, por lo que decidió instalarse en Estados Unidos. “Me iba demasiado bien, tenía mi carrera profesional, pero necesitaba aprender inglés para seguir ascendiendo”, recordó en diálogo con Primer Impacto.
En la ciudad de Nueva York, Marín comenzó su camino laboral como mesero en un restaurante. Más adelante, cambió de rumbo y empezó a vender tamales en una esquina cercana a la parada del tren de la calle 82. Según relató: “Un día fuimos a buscar tamales y no vendían. Hicimos para nosotros, llevé algunos al trabajo y me los empezaron a comprar. Así nació la idea”.
Durante ese mismo período, atravesó una etapa marcada por una profunda crisis personal. En los primeros meses de la pandemia, Marín vivió una separación y asumió en soledad la responsabilidad del cuidado de su hija: “Ella es ese ‘para qué’ que tengo todos los días”, afirmó al describir el rol central que ella ocupaba en su vida diaria. Al referirse a esa experiencia, agregó: “Ser padre y madre al mismo tiempo fue muy difícil, pero no imposible”.
Mientras tanto, su negocio seguía funcionando en las calles, sin interrupciones, y seguía en crecimiento. De acuerdo con sus propios cálculos, entre enero y diciembre de 2020, logró facturar un total de US$1 millón con la venta de tamales.
La apertura de sus restaurantes colombianos: la expansión comercial de su negocio callejero
El crecimiento del emprendimiento derivó en la apertura de La Tamal Colombiana, su primer restaurante. Actualmente, tiene tres locales en Nueva York y Nueva Jersey, con entre 90 y 95 empleados, en su mayoría personas de origen latinoamericano.
Su producto llega a más de 30 estados y alcanza un volumen de distribución de 200 mil unidades al año. “En este momento estamos abriendo nuestro tercer restaurante y la meta del otro año es llegar a 25”, expresó Marín.
Además de su actividad gastronómica, Marín ofrece charlas y seminarios en distintos estados del país norteamericano. También brindó este tipo de actividades en Colombia. “He llenado auditorios con casi 10.000 personas contando cómo creé una marca”, señaló.
Las presentaciones están orientadas a personas que inician proyectos o atraviesan etapas de cambio. “Nada es difícil. Todo se puede. Solo se necesita esfuerzo y una motivación —para mí fue mi hija—, y saber que las historias del sueño americano existen”.
¿Qué entiende por “sueño americano”?
Alejandro Marín definió lo que significó para él llegar a Estados Unidos: “El sueño americano es más allá del dinero”, afirmó. Para Marín, no se trata solo de obtener ganancias materiales, sino de algo mucho más profundo.
“Es saber que los inmigrantes podemos llegar a un país y hacer historia sin ser de ese lugar”, expresó, al referirse al valor que otorga a las oportunidades que encontró. En su reflexión, también destacó que: “Uno no es de donde nació, sino de donde quiere estar”.