El próximo Superclásico entre Boca y River tendrá una preponderancia mayor a la de los más recientes. Esta vez, cuando se enfrenten por la fecha 14 del Torneo Clausura 2025, puede que se disputen mano a mano un boleto a la Copa Libertadores 2026. Ambos están entre los tres primeros de la Tabla Anual de la Primera División, es decir, en zona de acceso al certamen continental, pero los persiguen de cerca Argentinos Juniors y Deportivo Riestra. Y una derrota, en cualquier caso, podría dejarlos fuera de la pelea.
El partido se disputaría el domingo 9 de noviembre a las 16.30 en la Bombonera. Previamente, los dos tienen que afrontar la decimotercera jornada del torneo local, en otro partido clave que determinará si llegarán con o sin margen de error al encuentro frente a su eterno rival. El xeneize visitará a Estudiantes y el Millonario recibirá a Gimnasia.
La última vez que se vieron las caras fue el 27 de abril de este año, en el marco de la fecha 15 del Clausura. En aquella oportunidad, en el Monumental, el equipo dirigido por Marcelo Gallardo se quedó con la victoria por 2 a 1 con goles de Franco Mastantuono y Sebastián Driussi (Miguel Merentiel empató transitoriamente para el visitante). El antecedente más reciente en el barrio porteño de La Boca, en tanto, es del 21 de septiembre del 2024, con triunfo del mismo club por 1 a 0 con un tanto de Manuel Lanzini.
El presente de los dos equipos más importantes del fútbol argentino no es bueno. O al menos no cumple con las expectativas, en ninguno de los dos casos. Boca está tercero en el Grupo A del Clausura con 20 puntos, a uno del líder, Central Córdoba, y del escolta, el Pincha. River, por su parte, se ubica quinto en la zona B con 21 unidades, a seis de los punteros: el Malevo, que está primero por diferencia de gol, y Rosario Central. En el escalafón que también suma lo hecho en el Apertura, el combinado de la Ribera está segundo con 53 y el conjunto de Núñez tercero con 52.
Más atrás, el Bicho y el club de Pompeya suman 51 puntos y sueñan con cortarle las alas a los dos gigantes del país. De ellos, el único que cuenta con “doble chance” es el Bicho, ya que disputará la final de la Copa Argentina ante Independiente Rivadavia y, en caso de salir campeón, se clasificará por esa vía a la etapa de grupos. Si no lo consigue y ese cupo queda en manos de la Lepra mendocina, lógicamente apuntará todos los cañones a la Tabla Anual.
Boca, River y Riestra, en consecuencia, podrían tener “una vida más” para ilusionarse con jugar la próxima Libertadores. Si el club de La Paternal gana la Copa Argentina y queda entre los tres primeros de la clasificación general, liberará un cupo que quedará en manos del que ocupe el cuarto lugar. Así, el que no logre terminar en el podio, probablemente se clasificará igual porque los perseguidores más cercanos son Racing, Lanús y San Lorenzo, que suman 46 unidades cada uno.

Sea como sea, para no entrar en especulaciones, el Superclásico será clave. Se pondrá en juego mucho más que el mero hecho de ganarle al eterno rival. Los dos quieren cerrar un año para el olvido con buenas noticias y comenzar a prepararse para un 2026 en el que están obligados a conseguir mejores resultados. Necesitarán cambios contundentes en el plantel y refuerzos de jerarquía, además de un cambio actitudinal, para volver a festejar. Están en deuda.
