El Ejército de Tailandia ha denunciado que uno de sus militares ha sufrido heridas por la explosión de una mina antipersona en la frontera con Camboya, un incidente que, según las autoridades tailandesas, representa una violación del alto el fuego pactado entre los dos países vecinos tras los últimos enfrentamientos.
El incidente tuvo lugar este martes por la mañana, cuando un grupo de paramilitares realizaba tareas de patrulla en la región de Surin. Uno de los efectivos pisó la mina, lo que le provocó graves heridas en un tobillo, ha explicado un portavoz del Ejército, Winthai Suvaree, en un comunicado.
Para las autoridades tailandesas, este caso es «una prueba evidente de que Camboya viola el acuerdo de alto el fuego» pactado tras las hostilidades de julio, así como compromisos internacionales como la Convención de Ottawa, que prohíbe la utilización de este tipo de artefactos.
«Es un ataque directo contra las fuerzas tailandesas en territorio tailandés», ha remachado el portavoz, que en su nota ha acusado a Camboya de negarse «sistemáticamente» a tratar el tema de las minas en las sucesivas reuniones llevadas a cabo para rebajar la tensión.
Tailandia esgrime que siempre ha defendido la necesidad de resolver cualquier disputa por la vía pacífica, pero al mismo tiempo se reserva «el derecho a defenderse» de las potenciales agresiones camboyanas en caso de que sea «necesario».