Científicos detectaron un cambio repentino en la temperatura del océano Pacífico que podría modificar la intensidad de esta temporada de huracanes 2025. Si bien el Atlántico también mostró un leve enfriamiento, los especialistas advierten que la combinación de ambos fenómenos podría derivar ser lo que derive en una temporada más activa de lo previsto.
Cambios en las temperaturas del océano y su impacto en los huracanes
De acuerdo a The Washington Post, un área clave del Pacífico, ubicada frente a las costas de Perú y Ecuador, mostró una baja repentina de temperatura a fines de abril. Este cambio abrupto se produjo tras un período de calentamiento que sorprendía a los especialistas.
Este enfriamiento podría dar paso a un patrón de La Niña, que históricamente está asociado a un aumento de huracanes en el Atlántico. Sin embargo, contrariamente, este océano también registró un leve enfriamiento, lo que suele estar vinculado a temporadas menos activas.
La interacción entre ambos fenómenos podría neutralizarse o derivar en eventos extremos, como se estima que ocurrirá en esta temporada. Todo dependerá de la evolución de las temperaturas en los próximos meses, advierten los expertos.
¿Por qué las temperaturas afectan a los huracanes?
Según explica The Cool Down, el calentamiento global, impulsado por la contaminación humana, intensifica los fenómenos climáticos extremos. Los gases tóxicos liberados a la atmósfera retienen calor y modifican los patrones climáticos.
Los especialistas del mencionado medio comparan el aumento de la temperatura terrestre con “esteroides para el clima”. En la última década, se registraron los diez años más cálidos de la historia.
Mientras tanto, en el caso de los huracanes, si bien la cantidad anual se mantiene estable, la intensidad de las tormentas creció. Según datos del Centro de Soluciones Climáticas y de Energía, los sistemas más devastadores ocurren cada vez con mayor frecuencia.
Pronóstico para 2025: una temporada de alto riesgo
El meteorólogo de AccuWeather Jonathan Porter alertó sobre una posible repetición del escenario de 2024. Ese año se registraron cinco ciclones de gran magnitud y fue “una de las temporadas de huracanes más mortíferas y costosas jamás vistas en el Atlántico”, según NPR.
El impacto suele concentrarse en
- El Caribe
- Centroamérica
- El golfo de México
- La costa este de Estados Unidos
Las autoridades recomiendan mantener planes de emergencia ante cualquier eventualidad.
Prepararse ante huracanes más frecuentes y violentos
Armar un kit de emergencia con agua, alimentos no perecederos y botiquín es una medida básica. Además, es importante no conducir en zonas inundadas ni ignorar las alertas meteorológicas.
Expertos también sugieren instalar paneles solares con baterías como respaldo energético. Esto permite mantener el suministro eléctrico ante cortes prolongados durante tormentas.
Por otro lado, reducir la emisión de gases contaminantes es clave para mitigar estos eventos. La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EE.UU. (NOAA, por sus siglas en inglés) insta a apoyar políticas ambientales y fomentar acciones comunitarias como el uso compartido de vehículos o la energía solar colectiva.
Nuevas mediciones oceánicas con tecnología de punta
Estos cambios climáticos son rastreados por miles de boyas autónomas en el océano, junto con informes de barcos y satélites que miden la temperatura de la superficie marina. The Post explicó que esta es la razón por la que se conoce que “las temperaturas oceánicas están bajando en una zona desolada del Pacífico oriental”.
Por su parte, el Programa Global de Monitoreo y Observación Oceánica de la NOAA afirma que “los termómetros oceánicos globales han generado miles de millones de mediciones en las últimas décadas” y que han sido “fundamentales” para interpretar las dinámicas oceánicas que aún desafían el entendimiento científico.