El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ha calificado como «gravísimo» que el exmando de la UCO Juan Vicente Bonilla hubiese pedido «desterrar» a Pedro Sánchez y le ha exigido «objetividad» en el desempeño de su trabajo.
Además, se ha hecho eco de la corrección de varios medios de comunicación de una información errónea que le atribuía la intención de poner una bomba lampa al presidente del Gobierno.
Torres ha compartido su creencia en una entrevista en ‘Cope Canarias’, que ha recogido Europa Press, en «la honorabilidad de la mayoría» de los políticos, de los jueces y fiscales, de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, «incluida lógicamente la UCO», que en su opinión tiene grandísimos profesionales, además del buen hacer de los periodistas.
Pero, no obstante, ha señalado que hay «excepciones» y que le parece «gravísimo» que un mando de la UCO «haya manifestado que hay que desterrar al presidente del Gobierno, que hay que enviar a Corea del Norte al vicepresidente del Gobierno, o que hay que acabar con el gobierno rojomorado».
En su opinión, «todo el mundo podemos tener opinión», pero a un responsable de la UCO que tiene que actuar como «arbitro» se le exige «que ejerza esas competencias». Lo ha dicho antes de recordar que ese miembro de la Guardia Civil «ha terminado formando parte del gobierno de Isabel Díaz Ayuso».
Preguntado por una información errónea que atribuía a un capitán de la Guardia Civil que ahora trabaja para la Comunidad de Madrid que barajó en 2021 la posibilidad de atentar contra Pedro Sánchez con una bomba lapa, Torres se ha hecho eco de que ha aparecido «algo nuevo este fin de semana» y que se ha «corregido».
«Pero quitando el que se podían haber matizado quienes habían hecho opiniones al respecto, sí me parece que es igualmente grave el que nadie señale, lo digo con sinceridad, a alguien que tendría que exigírsele, lógicamente, objetividad», ha añadido.
Sobre la mención que hicieron hasta tres ministros de esa información errónea, Torres ha emplazado a medios que la publicaron a que lo confirmen, y ha traído al presente que él ha sido víctima de «portadas falsas», como cuando se le acusó de haber encriptado su teléfono, y que luego se corrigen «en una esquinita».
