Tres orejas de distinto peso en la Maestranza, pero solo la de Morante fue de ley

admin

Paco Aguado

Sevilla, 5 may (EFE).- La terna que hizo el paseíllo hoy en la Maestranza de Sevilla, Morante de la Puebla, José María Manzanares y Alejandro Talavante, saldó su actuación con una oreja por coleta de tres de los toros de la variada corrida de Hermanos García Jiménez, solo que la paseada por el director de lidia fue la única de verdadero peso, un trofeo de ley por el valor exigido para cortarla.

Y es que, como es casi norma habitual, al veterano torero cigarrero -como se conoce a los nacidos en Puebla del Río- le tocó el peor lote, el de menos opciones y complicaciones, de un encierro de la familia Matilla, que tuvo otros cuatro ejemplares que dieron claras opciones a sus compañeros para haber abierto la Puerta del Príncipe.

Pero, finalmente, Morante volvió a tener que hacer un alarde de valor y de maestría para marcar las diferencias más allá del igualado «marcador», como diferente a los otros premiados, en profundidad, méritos y trascendencia, fue su trasteo ante un cuarto de la tarde, el de más alzada del encierro, de seco y exigente comportamiento.

Sucedió que, tras empujar con fuerza en varas y tomar con codicia por el pitón derecho la primera tanda de muletazos que le cuajó el sevillano, el astifino toro de Matilla comenzó a reservarse, a frenarse en sus arrancadas por ese lado y a salirse de la suerte por el otro, como amagó desde su salida.

Sólo que Morante no dio el paso atrás, sino que, llenando la escena con torería, se dispuso a apostar por la faena, aguantando varias y amenazantes coladas de un toro que se fue rajando y sacando violencia en un final de trasteo de enorme mérito, resuelto de manera muy airosa, hasta en los adornos, al manejar también perfectamente el juego de querencias.

Y tras volcarse de nuevo en la estocada, dispuesto a que su esfuerzo no se quedara sin premio, se llevó esa oreja de ley que no había podido cortarle al desrazado sobrero salido en primer lugar, con el que estuvo paciente y relajado para robarle incluso algunos muletazos de buen trazo.

Tras ese primer remiendo de la misma divisa salió al ruedo un colorado terciado y manejable que fue yendo a más a medida que José María Manzanares se asentaba con él para, exigiéndole de más en los primeros compases y con muy distinta colocación en los cites, no acabar de templarle en un trasteo de altibajos pero aparente, para el que se pidió esa amable oreja que acabó paseando el alicantino.

Claro que mejor aún fue el quinto, el toro más completo de la corrida y uno de los pocos realmente destacados de lo que va de feria, pues el castaño, muy ofensivo de pitones, ya salió descolgando con clase desde que, como también había hecho ante al toro anterior, Manzanares lo saludó suavemente a la verónica.

Mantuvo el de Matilla esa clase en las embestidas durante toda su lidia, y además de manera suprema por un pitón izquierdo por donde el torero dinástico solo se colocó en la mitad de las tandas de pases de una faena también asentada de plantas, sí, y con momentos vistosos, pero notablemente ligera de muñecas, con el animal siempre adelantándose a una muleta muy volandera e inconcreta que no lo acabó de reducir.

Un pinchazo antes de la estocada evitó que, probablemente, se hubieran pedido las dos orejas para el de Alicante, a tenor de cómo el público había jaleado su trabajo, y de la misma forma que se las pidieron después a Alejandro Talavante por lo realizado ante el sexto, un toro rajado pero de pajuna nobleza con el que el extremeño hizo un despliegue de efectismo superficial.

Si el torero de Badajoz con el bravo tercero, que tuvo entrega y fuerza en sus arrancadas incluso para coger en banderillas a Javier Ambel, no citó una sola vez con recíproca sinceridad , con ese fácil último de la tarde-noche, que se salía, pero no se iba, de los pases buscando las tablas, Talavante volvió a meterse en el refugio de la pala del pitón en el toreo fundamental.

Así las cosas, su gran baza para calentar al público que, pasadas ya las dos horas y media de corrida, quería salir también camino del real de la feria a ver el encendido del alumbrado, fue dar fiesta con pases «de todas las marcas», desde el cambiado y la arrucina con que abrió la faena de rodillas en los medios hasta los molinetes y los cambios de mano con el toro ya acobardado en tablas, suertes de recurso que, también en el templo taurino de Sevilla, se tomaron por fundamentales y hasta merecedoras de dos orejas que, con la mejor sensatez, la presidencia dejó en una.

——————

FICHA DEL FESTEJO:

Seis toros, incluido el sobrero que sustituyó al flojo primero, de Hermanos García Jiménez (5º y 6º con el otro hierro de la casa, Olga Jiménez, de dispar presencia, por su desigualdad de cuajo y alzadas, y de astifinas cabezas. De juego también variado, la mayoría resultaron nobles y manejables, en distinto grado de raza, con un quinto de gran calidad en la muleta y un tercero con entrega en sus embestidas como más destacados.

Morante de la Puebla, de purísima e hilo blanco: pinchazo bajo y estocada perpendicular (ovación tras aviso); estocada desprendida (oreja tras aviso).

José María Manzanares, de azul noche e hilo de bronce: pinchazo y estocada trasera (ovación tras aviso; estocada trasera desprendida (oreja).

Alejandro Talavante, de blanco y oro; estocada desprendida (silencio); estocada delantera (oreja con fuerte petición de la segunda).

El banderillero Javier Ambel resultó prendido al banderillear al tercero, que le infirió, según el parte médico, una cornada «en el compartimento anterior del muslo derecho suprafacial, con trayectoria anterior ascendente entre recto anterior y vasto interno, con scalp de 30 cms. sin afectación de estructuras vasculares», de pronostico menos grave, además de sufrir contusiones costales y cervicales.

Noveno festejo de abono de la Feria de Abril de Sevilla, en tarde de nubes y claros y con cartel de «no hay billetes» en las taquillas (12.500 espectadores.EFE

Deja un comentario

Next Post

Onelia Molina confirma el fin de su relación con Mario Irivarren: “Mi paz y tranquilidad son lo primero”

La relación entre Onelia Molina y Mario Irivarren llegó a su fin de forma definitiva, luego de una tensa conversación que ambos sostuvieron la noche del 30 de abril de 2025. La modelo arequipeña explicó en una reciente entrevista en ‘Mande quien Mande’ que decidió terminar con el chico reality […]
Onelia Molina confirma el fin de su relación con Mario Irivarren: “Mi paz y tranquilidad son lo primero”

NOTICIAS RELACIONADAS

error: Content is protected !!