CONTIENE SPOILERS MENORES.- James Marsden vive un momento destacado en su carrera tras recibir una nominación al Emmy por su papel de presidente asesinado en la serie Paradise y mientras se prepara para regresar al universo de superhéroes con Avengers: Doomsday. En una entrevista con Vanity Fair, el actor compartió detalles sobre la complejidad de sus personajes, la inspiración detrás de su trabajo y su visión sobre el poder y la política en la ficción actual.
En Paradise, Marsden interpreta a Cal, presidente de Estados Unidos marcado por sus contradicciones. El actor reconoció a Vanity Fair que dudó en aceptar el papel, pues no se consideraba adecuado para ese tipo de personaje y recordaba su experiencia previa en El mayordomo de la Casa Blanca, donde sentía ser demasiado joven para encarnar a un mandatario.
Sin embargo, la propuesta de Dan Fogelman, creador de la serie, lo convenció al ofrecerle un personaje complejo, con problemas de alcohol, cargado de secretos y, sobre todo, un hombre que nunca deseó realmente ocupar la presidencia. “Fue empujado a la política por su padre dominante, y eso me pareció inmediatamente interesante”, relató Marsden.
Trama postapocalíptica y el presidente asesinado
La historia de Paradise se desarrolla en un contexto postapocalíptico. El personaje de Marsden muere en el primer episodio, lo que da inicio a una investigación encabezada por su agente del Servicio Secreto, interpretado por Sterling K. Brown, para descubrir al responsable y los motivos detrás del crimen.
La serie, ambientada en un gigantesco búnker subterráneo en Colorado financiado por una multimillonaria, utiliza flashbacks para reconstruir los hechos que llevaron al asesinato del presidente, permitiendo a Marsden explorar diferentes matices de Cal a lo largo de la temporada. El actor resaltó ante Vanity Fair el desafío interpretativo de un personaje capaz de alternar momentos desenfadados —como cantar canciones de Phil Collins— con otros en los que soporta el peso del mundo.
Marsden reflexionó, además, sobre la influencia de los multimillonarios en la política, tema central en la serie. Según explicó a Vanity Fair, la trama plantea la idea de que el millonario tecnológico se convirtió en el gobierno.
Aunque evitó afirmaciones categóricas, señaló que la narrativa explora dinámicas de poder por fuera de la política tradicional. “No es una serie política, trata sobre las dinámicas de poder”, puntualizó. El actor mencionó que su personaje toma inspiración de varios presidentes estadounidenses, como John F. Kennedy, Bill Clinton, Barack Obama y George W. Bush, aunque el objetivo fue crear un perfil original a partir de matices de cada uno.
Incertidumbre sobre su regreso y el impacto de Cíclope
Sobre la posibilidad de regresar en la segunda temporada de Paradise, Marsden prefirió mantener la incertidumbre. Confirmó que la producción está cerca de finalizar, pero no adelantó detalles sobre su participación.
Recordó que, en la serie Muertos para mí, su personaje terminó regresando aun cuando parecía haber concluido su historia. Esta vez, compartió que el propio Fogelman le comentó, en tono de broma, que de haber anticipado el éxito de su interpretación habría buscado la manera de mantenerlo en la trama. Pese a dejar la puerta abierta a futuras sorpresas, Marsden advirtió que no desea crear falsas expectativas sobre un regreso.
El actor también abordó su retorno al papel de Cíclope en Avengers: Doomsday, una experiencia que calificó como un reencuentro especial con un personaje que marcó un hito en su carrera. Marsden reconoció ante Vanity Fair que, tras dos décadas, volver al traje de superhéroe supone un reto físico, pero también una oportunidad para conectar con una generación de seguidores que durante años esperaron su regreso. “Fue una experiencia muy divertida, un verdadero regreso a casa”, afirmó.
A lo largo de su trayectoria, Marsden se inclinó por personajes complejos, distantes del estereotipo del galán tradicional. Explicó que, desde sus inicios en el teatro escolar, lo atrajeron los papeles con aristas, tanto en la comedia como en el drama.
Volver a encarnar a Cíclope representa para Marsden más que un simple regreso a un papel icónico: significa reencontrarse con el proyecto que lo impulsó a la fama y con un personaje que, según sus propias palabras, siempre tendrá un lugar especial en su carrera.