Un video publicado por la cuenta TikTok de un desguace, @desguacemotocoche, ha dejado a muchos usuarios reflexionando sobre el impacto de normativa medioambiental sobre las Zonas de Bajas Emisiones. En su última publicación, el creador muestra cómo un Volvo XC90 de 2006, que fue durante años el “coche de papá” de una familia, termina en el desguace debido a las restricciones de las ZBE. Las declaraciones del mecánico, con un toque nostálgico, ha querido empatizar con otros conductores que han visto cómo sus vehículos se han visto obligados a abandonar la circulación por la normativa ecológica.
“Buenas chicos, hoy vengo a hablaros del coche de papá, ese coche que tantísimo sacrificio le costó a tu padre comprarse y era el coche de tu vida, el coche de los viajes, el coche en el que te peleabas con tu hermano”, empieza el video. El creador hace un homenaje a este vehículo, que no solo fue un transporte, sino un símbolo de recuerdos familiares.
Este coche es un Volvo XC90 de 2006, que en su momento fue considerado “lo mejor de lo mejor”. Según el trabajador del desguace, el vehículo contaba con extras de lujo que algunos coches actuales ni siquiera cuentan. “Traía faros bixenon con lavafaros, retrovisores abatibles con intermitente y luz de cortesía, asientos de piel con regulación eléctrica y memorias. Al interior no le faltaba detalle, tenía un botón para cada cosa. Traía navegador, sistema Dolby Surround, control de crucero, Bluetooth y por si acaso, teléfono”, describe con entusiasmo.
Multitud de avances y un inconveniente
El motor de este Volvo era un 2.4 diésel de 5 cilindros, una auténtica máquina para su época. Sin embargo, el mecánico también admite que el vehículo tenía un pequeño fallo, “a veces se le rompían los inyectores”, un inconveniente menor en comparación con la cantidad de avances que tiene. Lo que realmente trajo al coche al desguace, sin embargo, fue la inviabilidad de cumplir con la normativa de emisiones actuales.
“El motivo por el que está aquí es la zona de bajas emisiones”, asegura. “Tiene la etiqueta B y no lo dejan entrar por las ciudades, se han visto obligados a cambiarlo por un híbrido, y eso sí que da coraje porque esto es un cochazo”, señala el creador, claramente molesto por la situación.
La normativa de las ZBE frente al valor sentimental
El Volvo XC90 no puede acceder a las zonas urbanas más restringidas debido a su clasificación de su etiqueta de emisiones. Esto ha obligado a la familia a deshacerse de él obligatoriamente, reemplazándolo por un vehículo híbrido, que aunque más ecológico, no tiene el mismo valor sentimental.
El creador concluye su video dejando una reflexión, “¿vosotros veis justo que el coche de vuestra infancia termine en un desguace solo por la pegatina?”. Con esta pregunta, invita a sus seguidores a reflexionar sobre cómo las políticas medioambientales afectan al mercado automovilístico y a la situación de las familias.
Este video ha generado multitud de comentarios y muchos usuarios han compartido historias similares sobre cómo sus vehículos antiguos han tenido que ser reemplazados por normativas ecológicas.
