El ambiente cotidiano de un supermercado en Narni, en el centro de Italia, ha sido escenario recientemente de una insólita acción, resultado a la vez de una aparente muestra de civismo y de un acto ilícito. Un hombre de mediana edad, residente de la localidad y sin antecedentes policiales, encontró una cartera cerca de la entrada del establecimiento y decidió entregarlo al personal de caja para que fuese devuelto a su dueño legítimo, según el medio Ternitoday.
Sin embargo, antes de proceder, este vecino decidió quedarse con el dinero que había en su interior, transformando lo que pudo ser un simple gesto solidario en un caso penal.
Denuncia por quedarse el dinero
Las cámaras de seguridad, clave para esclarecer el casoión se ha tornado aún más controversial cuando el propietario original del portafolio, un hombre de 38 años y nacionalidad extranjera, recuperó el objeto y notó que faltaban 600 euros. Tras confirmar lo que le faltaba, decidió presentar una denuncia.
De acuerdo con el medio italiano, fue así como los carabinieri de Narni iniciaron una investigación que, en pocos días, permitió aclarar la secuencia de los hechos y determinar la responsabilidad del cliente del supermercado que había encontrado la cartera.
Registro en las cámaras de seguridad
El punto de inflexión en el avance de la investigación se debió al minucioso análisis de los registros de las cámaras de videovigilancia del supermercado. En las imágenes, los agentes pudieron observar con precisión lo ocurrido: la cartera quedó en el suelo tras la distracción de su dueño y, poco después, otro cliente lo recogió del piso. Antes de llevarlo a la caja, el hombre sacó todo el efectivo que llevaba y lo guardó discretamente. Acto seguido, se dirigió al personal del establecimiento y entregó la cartera ajena ya desprovista del dinero.
La revisión de las grabaciones no dejó lugar a dudas. Lo que en un principio los empleados del supermercado interpretaron como un sencillo acto de responsabilidad civil por parte del cliente, pronto quedó desmentido. El hecho de que el hombre se marchara inmediatamente del lugar sin realizar compras fortaleció la hipótesis de una acción premeditada. Tan pronto como el legítimo propietario fue avisado para recoger su monedero y detectó la falta del dinero, se puso en marcha el dispositivo de investigación policial, según Ternitoday.
Denuncia formal del presunto ladrón
Gracias a la coordinación entre la víctima y los agentes de policía, y mediante la identificación del sujeto a partir de las cámaras, los carabinieri lograron descubrir la identidad del hombre que había robado el dinero. A pesar de su ausencia de antecedentes penales, la conducta fue calificada como robo agravado debido al aprovechamiento de una circunstancia casual para actuar en detrimento de otro ciudadano.
Concretamente, en España, el Código Penal, mediante los artículos 253 y 254, establece penalizaciones para quienes se apropian de bienes ajenos sin consentimiento. Dichas sanciones pueden oscilar entre un mes y dos años de prisión, dependiendo del valor del objeto encontrado.
Por otro lado, el Código Civil, en su artículo 615, ofrece una solución para evitar infracciones al indicar que todo objeto móvil hallado debe ser devuelto a su propietario. En caso de desconocerse la identidad del dueño, el hallazgo debe reportarse inmediatamente al Alcalde del municipio o, de manera más accesible, a la oficina de objetos perdidos de la policía local.