La construcción no termina de hacer pie, aquejada por el aumento de costos, la baja demanda y la incertidumbre cambiaria. Eso es, al menos, lo que surge de una encuesta a empresarios del sector, en la que 69% de ellos opinó que experimentó una disminución en su nivel de actividad con respecto al año pasado.
Esta conclusión, que contrasta con la suba interanual de 15,8% y el avance de 5,6% en el acumulado del primer trimestre de este año que reportó el Indec el mes pasado, se desprende de los resultados de la 26ª edición del Estudio de Opinión Construya. Este trabajo se llevó a cabo entre el 31 de marzo y el 25 de abril de 2025 y participaron 506 profesionales de la cadena de valor de todo el país.
La mayoría de los empresarios consultados respondió que la caída de la actividad fue superior a 20% en el último año (más de 4 de cada 7 encuestados que señalaron una baja). “Para otro 15% la baja de la actividad se ubicó entre 10% y 20% y para el restante 10% la contracción fue inferior a 10% anual”, se indicó.
Asimismo, 16% de los entrevistados consideró que logró mantener el nivel de actividad en el último año. Y del otro lado, 15% de los encuestados opinó que su actividad aumentó en los últimos meses. Para 7% del total la suba fue inferior a 10% anual y para 6% la mejora se ubicó entre 10% y 20%. En tanto, sólo 2% del total de los consultados informó una suba superior a 20% anual.
Hay que recordar que en los tres primeros meses de este año –el último dato disponible del Indec corresponde a marzo– la construcción tuvo una marcha errática, con una caída de 1% en enero, un crecimiento de 2,1% en febrero y una nueva baja de 4,1% en marzo.
El economista Gustavo Vallejo, jefe del Departamento de Estadísticas del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric), advirtió que los niveles de despachos de insumos y empleo siguen siendo bajos en términos históricos. “Aún no se confirma la expectativa de recuperación, y se esperan anuncios que activen la actividad, como una segunda etapa del blanqueo que pueda canalizarse hacia el sector”, opinó el especialista.
Existe, sin embargo, cierto optimismo empresarial para el mediano plazo. “En la última encuesta se observó una leve mejora de las expectativas para los próximos doce meses. Del total, 47% consideró que su actividad será mayor en un año (+4 pp), 29% que será igual (-3 pp) y 24% que será inferior (+4 pp). En esta ocasión nadie dejó de responder la encuesta (-5 pp)”, se detalló en el estudio de Construya.
Entre las mayores dificultades que mencionaron los empresarios sobresale el mayor costo de la construcción, que fue el principal problema para arquitectos, desarrolladores, constructores e ingenieros. Siguió en importancia la baja demanda del mercado, que emergió como el escollo más importante para distribuidores de materiales y maestros mayores de obra. En tercer lugar, apareció la incertidumbre cambiaria.
El ajuste que hizo el Gobierno en la obra pública no pasa inadvertido en las conclusiones del estudio de Construya. En este sentido, a la hora de responder qué impulsa actualmente la demanda en su negocio, 46% respondió que lo hacen las obras privadas medianas y pequeñas; 38% dijo que la mayor tracción provino de la refacción y ampliación; 13% respondió que fueron las obras grandes nuevas del sector privado, y solo 3% indicó que fue la obra pública.