La noche de Ibiza encontró a Wanda Nara brillando como solo ella sabe. Luego de recorrer Milán, Roma y hasta presenciar la final de la Champions League en Múnich, la empresaria desembarcó en la isla española y convirtió cada salida nocturna en un auténtico acontecimiento.
Su última velada no fue la excepción: entre moda de lujo, encuentros explosivos y shows para el recuerdo, la mediática compartió todos los detalles con sus seguidores y volvió a confirmar que, cuando cae el sol en el Mediterráneo, su nombre ocupa el centro de la escena.
Si bien las mañanas en la playa y las jornadas de compras fueron protagonistas en los primeros días, Wanda volvió a brillar al caer la noche. Fiel a su estilo, cuidó cada detalle de su look para una velada donde el lujo y las últimas tendencias marcaron la diferencia. En sus historias y publicaciones, la empresaria se animó a un vestido rojo ajustado, con tiras finas y textura acanalada, ideal para las altas temperaturas del verano europeo. Además, le dio un toque de distinción al complementarlo con una cartera blanca modelo Kelly Mini de Hermès, una pieza que se ha convertido en objeto de deseo y cuyo valor parte en los 7.000 euros, redondeando un outfit que cosechó miles de ‘me gusta’ y todo tipo de elogios en redes.
Los comentarios se multiplicaron al ritmo de las fotos: “El rojo y la soltería son para vos”; “Ella es la patrona, ¿podrán ser ella?”; “Rojo para la envidia”; “Esa cartera es de ensueño”. El público no tardó en destacar no solo el mix entre elegancia y audacia, sino la cuidada elección de cada prenda y accesorio para la ocasión. Wanda, además, se permitió bromear sobre su presente sentimental, recibiendo guiños de sus fanáticos en cada posteo.
La noche, sin embargo, reservaba más sorpresas. Entre copas y flashes, Wanda se encontró con una las figuras más resonantes de la música española actual: Bad Gyal. Alba Farelo i Solé, verdadero nombre de la joven, es conocida por fusionar reggaetón, dancehall y trap en hits que la catapultaron a la fama internacional. Sus colaboraciones con Anitta y Quevedo, así como su despliegue como DJ y referente de moda urbana, completan el perfil de una estrella que marca tendencia dentro y fuera del escenario.
Nara y Bad Gyal se cruzaron en un exclusivo bar nocturno de la isla, donde la joven encabezó un show erótico rodeada de luces, música y mucho desenfado. Las imágenes del encuentro no tardaron en circular: ambas posaron sonrientes ante la cámara, mientras que, momentos más tarde, la artista española se adueñaba del salón con pasos de baile provocativos junto a un hombre. El momento quedó registrado en Instagram, donde la propia cantante definió su salida como “una cenita súper tranquila”, dejando en claro que la transgresión y el espectáculo forman parte de sus presentaciones.
Más allá del glamour y la movida nocturna, Wanda supo alternar sus jornadas entre escapadas a la playa, sesiones de fotos con estilismos veraniegos, degustaciones gastronómicas y compras por las boutiques más exclusivas de la isla. Su rutina, compartida casi en tiempo real, dejó en claro el magnetismo que genera su figura, conectando con quienes siguen cada avance de su agenda europea.
Como cada temporada, sea bajo la luz del sol o la de la luna, Nara vuelve a mostrarse como ícono de estilo y buen vivir, capaz de fusionar lujo, diversión y espontaneidad en cada salida. Las noches de Ibiza la encuentran, una vez más, en la cima: rodeada de glamour, buena compañía, tendencias y una energía que conquista tanto a los escenarios más exigentes como a la platea virtual que la observa desde todos los rincones del mundo.
