DENPASAR (AFP).- Un tribunal indonesio condenó este jueves a una ciudadana argentina a siete años de prisión por haber intentado introducir cocaína en la isla turística de Bali, Indonesia. La mujer -identificada como Eleonora Gracia, de 46 años- había sido arrestada en marzo de este año en el aeropuerto internacional proveniente de Dubái con más de 244 gramos de cocaína en un preservativo oculto en su vagina.
La sentencia fue anunciada por el juez de un tribunal de Bali, Tenny Erma Suryanthi. A su vez, la confesión de la argentina llevó al arresto del británico Elliot James Shaw, de 50 años, quien era el destinatario de la droga y fue condenado a cinco años y medio de prisión, y a una multa de 61.386 dólares.
Ambos habían sido detenidos en marzo de este año; pesaba sobre ellos una posible condena de muerte en pelotón de fusilamiento, ya que en el país asiático rigen leyes estrictas en cuanto al narcotráfico. Finalmente se decidió que sea una pena menor.
Rudy Ahmad Sudrajat, jefe de la agencia de narcóticos de Bali, señaló que la red mundial de drogas tiene como objetivo a los visitantes extranjeros en áreas turísticas de la ciudad y detalló: “Todavía estamos llevando a cabo la investigación para descubrir la red internacional de cocaína y detener su distribución”. En tanto, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito asegura que Indonesia es un importante centro de contrabando de drogas a pesar de tener algunas de las leyes más estrictas del mundo. En parte lo atribuye a que los carteles tienen como objetivo a su población joven.
Según precisó Sudrajat, la sospechosa declaró que recibió la cocaína en México de parte de un hombre británico y que se le prometió un pago de US$3000 después de concretar el traslado. Los oficiales detuvieron más tarde al hombre, quien sospechan es el distribuidor de nivel más bajo, en una casa de huéspedes en el vecindario de Kerobokan en el distrito de Badung.
Gracia fue pasajera del vuelo EK368 de Emirates en la ruta Dubái-Bali que llegó al Aeropuerto I Gusti Ngurah Rai. Tras su arribo, y por las sospechas de las autoridades, la mujer fue dirigida a una zona de inspección especial. Allí le realizaron una revisión exhaustiva del equipaje y un registro corporal, y fue en ese momento que identificaron algo dentro de su cuerpo. Tras las pruebas de laboratorio, se confirmó que el polvo era cocaína y que el método de contrabando utilizado fue la “inserción vaginal”, es decir, el transporte de droga dentro de sus genitales.
Antecedentes
En otro caso similar, el mismo tribunal condenó hace pocas semanas a tres británicos a un año de prisión por tratar de ingresar un kilo de cocaína a Bali.
A su vez, la agencia antinarcóticos también anunció el arresto de un brasileño y una sudafricana. Los dos viajaban separadamente cuando fueron detenidos el 13 de julio en el aeropuerto de Bali y se exponen a la pena de muerte en caso de ser declarados culpables.
El brasileño supuestamente cargaba dos bolsas con poco más de tres kilos de cocaína, según indicó en conferencia de prensa Made Sinar Subawa, de la agencia antidrogas local. La sudafricana, en tanto, llegó desde Singapur con casi un kilo de metanfetamina oculta en su ropa.
Actualmente hay decenas de traficantes sentenciados a muerte en el país: Indonesia efectuó sus últimas ejecuciones en 2016, un indonesio y tres nigerianos sentenciados por narcotráfico.