En la autopista A4 que conecta Turín y Milán, la policía italiana ha detenido a tres ciudadanos suizos acusados de protagonizar una carrera clandestina a 230 kilómetros por hora al volante de dos Lamborghini y un Ferrari. La intervención se produjo tras una persecución de “alta tensión”, según informaron tanto Corriere della Sera como el medio suizo Le Nouvelliste, que citaron el comunicado de la policía de Novara.
El operativo se activó el 9 de septiembre, cuando los agentes detectaron a los coches de lujo circulando a velocidad extrema en plena hora punta, y decidieron emplear una táctica especial conocida como el “dispositivo de seguridad safety car”. Esta maniobra consiste en colocar vehículos patrulla delante del tráfico y reducir la velocidad de la vía, logrando así controlar el flujo y permitiendo la intervención segura de los agentes. La policía de tráfico de Turín lideró la operación, interceptando finalmente a los tres conductores junto a otros ocho participantes que viajaban en superdeportivos de alta gama.
Al detenerlos, la policía de Novara incautó los tres vehículos y retiró las licencias de conducir de los conductores, que tienen entre 30 y 40 años. El restablecimiento del orden en la carretera incluyó la detención de otros ocho vehículos de lujo que formaban parte de la caravana rumbo a Milán.
Según declaraciones de la policía recogidas por ambos medios, la actuación de los detenidos “puso gravemente en peligro no solo su vida, sino también la de todos los usuarios de la carretera”. Las autoridades judiciales de Novara han presentado ya cargos formales contra los tres suizos.
Carreras clandestinas en España
En España, las carreras clandestinas no son habituales, pero de vez en cuando saltan a las noticias. El año pasado, tres personas fueron arrestadas por la Guardia Civil, acusadas de participar en una carrera ilegal organizada entre los kilómetros 17 y 11 de la carretera M-45, dentro del término municipal de Madrid. Tenían entre 24 y 26 años y todos contaban con antecedentes por distintos delitos.
Tras analizar los vídeos viralizados en redes sociales, los agentes lograron identificar a los implicados, que conducían dos vehículos de gran cilindrada, ambos de color blanco, a alta velocidad y de manera paralela en la carretera M-45, entre los kilómetros 17 y 11 dentro del término municipal de la capital española. Un tercer automóvil acompañaba la carrera, bloqueando la vía y grabando la escena desde el interior; esas imágenes después circularon ampliamente por internet.
La reconstrucción de los hechos permitió a la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil atribuirles un delito de conducción temeraria. Los sucesos ocurrieron el 21 de enero, sobre la 01:45, y según señaló la Dirección General del Instituto Armado, el objetivo fundamental de estas carreras radica en las apuestas irregulares entre participantes. Las autoridades recalcan el grave riesgo para la vida tanto de los participantes como del resto de usuarios de la carretera. Los polígonos ubicados entre los distritos de Villaverde y Vallecas, en la capital, son dos puntos calientes donde se suelen citar estos conductores.