Llega junio y la mayoría de los trabajadores registrados se pregunta qué hacer con el sueldo anual complementario (SAC). Popularmente conocido como aguinaldo, este ingreso que los empleados en relación de dependencia reciben dos veces al año, puede servir para muchas cosas, desde pagar deudas a realizar inversiones. En LN+ se compartieron los mejores consejos.
Pagar deudas
Una buena opción, por ejemplo, para aquellos que pagan el mínimo de la tarjeta de crédito. En esos casos, la tasa mensual efectiva supera el 7% mensual: una decisión, a la larga, muy costosa.
Ante este escenario, el aguinaldo puede servir para reducir preocupaciones y gastos futuros en intereses. Además, mejora el score crediticio.
Adelantar consumos
En contextos inflacionarios suele ser una práctica más que habitual. Aquí entran en juego lo que se conoce como compras necesarias -por ejemplo una refacción en nuestros hogares-, como así también evitar endeudarse a corto plazo.
Crear un fondo de emergencia
Una opción para los que miran -y proyectan- su economía en un mediano y largo plazo. ¿Los beneficios? Más seguridad financiera ante imprevistos y una mayor tranquilidad y previsibilidad.
Invertir el dinero o comprar dólares
Los pro de elegir esta decisión son dos. Por un lado permite el crecimiento del capital, y por el otro, la diversificación en instrumentos financieros.
Además, protege contra la devaluación del peso. Si se analiza lo que pasó en 2024, la mayoría perdió contra la inflación. Pero hoy, comprar dólares y ponerlos en un plazo fijo brinda hasta un 5,5% de tasa de interés anual.
Plazo fijo
Sin dudas una de las opciones más elegidas entre los trabajadores registrados. Con una tasa efectiva de 2,6% mensual, le gana a la inflación. Además, otorga seguridad y rendimientos fijos. Pero hay que estar atentos a un detalle: como ya no existe un mínimo garantizado, hay que analizar en cuál banco nos conviene colocar nuestro dinero.