Luego de que hace un mes Hugo Aguilar Ortiz invitara a Vidulfo Rosales Sierra a una de las reuniones de trabajo previo a la toma de protesta como ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la tarde de este 20 de septiembre de 2025, se confirmó la integración del exabogado del caso Ayotzinapa a la Corte.
En este organismo, Rosales Sierra desempeña funciones como secretario de estudios y cuenta la cual forma parte de la coordinación general de asesores de la presidencia.
Según información publicada en el portal institucional del máximo tribunal del país, Vidulfo Rosales ocupará este puesto percibiendo un salario neto estimado de poco más de 118 mil pesos mensuales. Entre los beneficios laborales a los que tiene acceso se encuentran el seguro de gastos médicos mayores y el seguro de vida.
Vidulfo Rosales renunció a caso Ayotzinapa y dejó el CDHM hace un mes
Luego de ser fotografiado en reunión con Hugo Aguilar lo que solo era una especulación fue creciendo, ya que el abogado renunció al Centro de Derechos Humanos de la Montaña (CDHM) Tlachinollan, así como de la representación legal del colectivo Nos Faltan 43, integrado por madres y padres de los estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, desaparecidos el 26 de septiembre de 2014.
En la carta anunciando su salida fechada el 19 de agosto, el abogado mencionó: “Me retiro de la primera línea de la lucha social con la frente en alto, con la seguridad de haber puesto un grano de arena en la pelea de nuestro pueblos. Mi compromiso con los pueblos indígenas, con las mujeres y hombres que luchan por mejores condiciones de vida sigue incólume”.
En entrevista para Infobae México el mes pasado, Rosales Sierra explicó que su renuncia al CDHM Tlachinollan se debió a motivos personales y de salud. Señaló que la defensa de los padres y madres de los estudiantes de Ayotzinapa exige plena dedicación, lo que complicaba su situación médica y otras valoraciones personales.
Destacó que su labor siempre fue en representación del centro y no de manera individual, y que al separarse de la organización perdería el respaldo institucional, político y moral necesario para enfrentar las dificultades, amenazas y presiones que implica el caso.
El abogado aclaró que su renuncia a Tlachinollan y a la representación legal de los padres de Ayotzinapa no estaba relacionada con una invitación a colaborar con la nueva SCJN.