
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha exigido sanciones contra todas las petroleras rusas, después de que Estados Unidos y la Unión Europea haya impuesto nuevos paquetes de sanciones contra Rusia, en medio del estancamiento en las conversaciones para un alto el fuego en Ucrania.
«Las sanciones que afectan a la infraestructura petrolera rusa y a las compañías petroleras rusas son un gran paso (…). Debemos presionar no solo a Rosneft y Lukoil, sino a todas las compañías petroleras rusas, a la ‘flota en la sombra’ y su infraestructura», ha declarado.
«La paz nace de la presión al agresor. Y debemos continuar haciéndolo», ha defendido durante una rueda de prensa en la que ha estado acompañado por el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, y varios líderes europeos tras una reunión de la Coalición de los Voluntarios en Londres.
El primer ministro británico, Keir Starmer, que ha acogido el encuentro –en el que varios mandatarios han participado de forma virtual–, ha asegurado que el presidente ruso, Vladimir Putin, «es la única persona que no quiere detener esta guerra», ya que «sigue ganando tiempo» mientras que Zelenski «lleva meses diciendo que está listo para un alto el fuego» y tener un cara a cara.
«Sus ataques contra civiles esta semana lo han dejado claro una vez más: apuntar contra infraestructura energética antes de la llegada del invierno, atacar niños en su guardería, acabar con la vida en Kiev de una niña de doce años y de un bebé de seis meses. Este es Putin. Todo el rato rechaza las oportunidades de acabar con la guerra», ha enumerado.
Por su parte, Rutte, que ha reiterado que la reunión ha sido «muy productiva», ha condenado la «agresión delirante de Putin» en la que «cientos de miles de rusos están muriendo» mientras que está obteniendo «muy poco territorio» en el frente. «Apenas avanza en el campo de batalla. Y donde hay avances marginales, estos se pagan a un alto precio», ha sostenido.
«Ucrania continúa defendiéndose con valentía y nuestro apoyo está dando resultados. Lo cierto es que Putin se está quedando sin dinero, tropas e ideas», ha expresado el jefe de la OTAN, que ha aplaudido la propuesta del inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, para que las tropas rusas y ucranianas se detengan «donde están ahora».
